A veinticuatro horas de haber iniciado un paro laboral, la dirigencia del sindicato de trabajadores del proyecto San Rafael decidió dejar sin efecto la medida tras llegar a un acuerdo con la empresa MINSUR, propietaria de la minera. El diálogo prevaleció entre las partes y finalmente se arribó a puntos concretos, hecho que puso fin a la paralización.
Cabe indicar que la dirigencia sindical justificó el paro en la disminución de las utilidades y en presuntas irregularidades y preferencias en su entrega. La compañía minera ha aclarado que las utilidades han sido abonadas de acuerdo a ley, tal y como ha sido reconocido por el propio sindicato.
Así mismo, MINSUR, había propuesto de manera voluntaria, a pesar de una fuerte caída en sus utilidades, a otorgar a sus trabajadores un “bono plus extraordinario”, comprendiendo sus expectativas económicas y mucho antes de que existiese siquiera amenaza alguna de huelga.
Sin embargo, tras el diálogo el sindicato comprendió que la empresa estaba haciendo esfuerzos más allá de las exigencias legales. Además, este tema se estaba viendo en la Dirección Nacional de Trabajo, pero fue dejado de lado por los dirigentes sindicales sin mayor motivación, razón por la cual el paro iba a ser declarado ilegal.