RCR, 18 de septiembre de 2021.– César Huamán, CEO de Simbiosis, señaló en el primer Jueves Minero en quechua, organizado por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP), que el emprendimiento andino Simbiosis ha logrado convertirse en una exitosa empresa comunal, en el distrito Incahuasi, en la sierra de La Libertad. Destacó que cientos de mujeres han logrado mejorar sus ingresos en el trabajo de cosechar hongos alimenticios de la mejor calidad para abastecer a los exigentes mercados nacionales y extranjeros.
“La minera Poderosa, la Asociación Pataz, Chugay, Sierra Liberteña apoyaron para iniciar estos trabajos productivos. El rol de las empresas privadas en apoyar estos proyectos es fundamental, los campos de pino contribuyen a la conservación del medio ambiente y del crecimiento de los hongos, los mismos permiten que los trabajadores alcancen mejores niveles de vida”, dijo.
Enfatizó que el año pasado se crearon proyectos similares en Lambayeque, Amazonas y La Libertad, y este año en cuatro regiones más, Cusco, Áncash, Piura y Huancavelica. “Ahora somos 8 regiones. Por eso en 2019 la iniciativa Simbiosis ha tenido un premio destacando como emprendimiento rural. El premio se llama ‘Perumin inspira’ por todo el trabajo de Simbiosis la minería nos ha ayudado, con ese apoyo trabajamos todos, para proteger el medio ambiente por el bien de la humanidad”, expresó.
Señaló que Incahuasi es un distrito que se encuentra a más de 3 mil msnm, donde se habla el quechua norteño. “En estos lugares las familias producían con su trabajo más o menos 390 soles mensuales, trabajaban en pequeñas extensiones de tierras, la parte silvestre de sus territorios comunales no aprovechaban en nada. El gobierno central, a través del programa Pronamach, realizaron plantaciones de arboles de pino y en estas plantaciones de pino aparecieron estos honguitos en forma de plato. No se sabía para que servían estos honguitos”, indicó.
“Este hecho en base a mis conocimientos adquiridos en la universidad, se llegó a conocer que estos honguitos eran para la alimentación. De ese modo, iniciamos trabajos en la parte silvestre de los terrenos comunales. En la actualidad el pueblo de Incahuasi produce buena cantidad y calidad de hongos comestibles. Ya existen más de dos mil hectáreas de cultivo de árboles de pino, que nos permite cosechar buena cantidad de hongos comestibles. Estos cultivos en terrenos silvestres”, expresó.
Rentabilidad y sostenibilidad
Relató que desde el 2007 inició una serie de investigaciones y gestiones, para desarrollar adecuadamente la cosecha de hongos con rentabilidad y sostenibilidad. En aquel entonces, con el apoyo de las exploraciones mineras Milenium, se realizaron los estudios correspondientes. De igual forma, apoyaron Agrorural, Pronamach y la comunidad. Con el apoyo y aporte de todos ellos se inicia esta experiencia de trabajo con mujeres de nuestra organización”, afirmó.
“Poco a poco iniciaron el recojo, secado y comercialización del hongo. Entre el 2010 y el 2011, después de mis estudios en la universidad Pedro Ruiz Gallo visité a mis padres, donde familiares pidieron apoyo. Con un familiar, que era el técnico Walter de la Cruz y mi sobrino el ingeniero Jefferson conversamos para mejorar el desarrollo de este proyecto. El 2010 iniciamos el trabajo de recojo y secado del hongo, inicialmente hacíamos secar en calaminas”, contó.
Destacó que actualmente Simbiosis trabaja con planificación y coordinación. “Es un trabajo de emprendimiento andino. Se construyeron habitaciones especiales para el secado del hongo. Adquirir esa experiencia no ha sido fácil y poco a poco se ha venido mejorando los resultados. Entre los años 2012 al 2014 se ha implementado otras variedades de mejor calidad, que son apreciadas en los mercados, el hongo peruano es bien apreciado en el mercado europeo”, dijo.
“La tecnología de recojo y secado ha mejorado enormemente. La tecnología ha mejorado bastante, incluso ya existe un libro sobre la experiencia y las tecnologías. Esta experiencia ha sido reconocida a nivel mundial. Esta tecnología ha sido validada por el Instituto Nacional de Innovación Agraria y recibimos un premio el 2020. Actualmente capacitamos a localidades de Cajamarca, Lambayeque, La Libertad y Amazonas”, remarcó.
Empoderamiento de la mujer andina
Subrayó que Simbiosis también está contribuyendo al empoderamiento de la mujer andina, debido a que un 95% de los trabajadores son madres y jóvenes estudiantes. “En cada campaña se cosecha un aproximado de 500 kilos. Cada kilo se vende a 20 soles, haciendo un total de 10 mil soles, algunas veces se saca 7 mil soles por campaña, un promedio de 200 soles para cada mujer. El precio del producto también se ha incrementado”, precisó.
Explicó que los hongos vienen en tres calidades, Regular, Gold y Premium, y deben tener los sellos del Senasa y con la garantía de ser un producto orgánico y seguro del Ministerio de Salud. “Estos hongos se consumen en muchas variedades de comidas y parrillas, prácticamente puede reemplazar a la carne, podemos decir que es una carne vegetal con muchas proteínas. El hongo se puede consumir con arroz, ceviche”, apuntó.
Remarcó que el proyecto tiene un doble impacto, pues con las plantaciones de pino se foresta el país. “La siembra de pinos nos brinda aire puro, mejora el ambiente y además crea el ambiente para que los hongos crezcan, generando economía en las familias que los cosechan y ganando experiencia en la producción de hongos”, observó.
“Por ejemplo, la producción en Chugay, La Libertad, en el 2020 fue de 500 kilos y para el 2021 produjeron dos toneladas, esto en plena pandemia y es un buen trabajo. Nuestras instalaciones en el pueblo Pullay son bien ordenadas, limpias y bonitas. Los técnicos siempre apoyan para que la calidad de los productos sea cada vez mejor”, manifestó.