RCR, 31 de mayo 2019.- El cultivo de Sacha Inchi se puede convertir en una alternativa para los agricultores de la selva, ya que es un producto altamente rentable y que se puede combinar con otros sembríos en los mismos terrenos, destacó el ingeniero agrónomo Mario Herrera Rojas.
En declaraciones al programa Amanecer en el Campo, de Red de Comunicación Regional, el especialista dijo que actualmente el Sacha Inchi se exporta a países de Europa por los diferentes beneficios que su consumo brinda a la salud.
El Sacha Inchi ha sido utilizado desde tiempos del Imperio Inca y su semilla es rica en proteínas, Omega 3, 6 y 9, vitamina E, carotenoides y fibras. Esas cualidades permiten regular el azúcar en la sangre y la presión sanguínea.
Además, disminuye el colesterol y los triglicéridos, mejorar la circulación sanguínea, reduce los problemas hormonales de las mujeres y los síntomas de la menopausia, posee propiedades anti-inflamatorias y beneficia la función cerebral.
La semilla se puede consumir de manera directa, o procesada como aceite para ingerirse solo o agregado en aderezos o ensaladas. También se comercializa en cápsulas.
Mario Herrera Rojas explicó que la siembra del Sacha Inchi no se realiza con estacas, sino a través de la semillas que se siembra en almácigos y cuando se tengan las plantas se trasladan a los terrenos de cultivo con una separación de tres metros.
Agregó que al ser una planta trepadora, se requiere instalar espalderas de tres metros de altura.
Anotó que la planta produce a partir del octavo mes un fruto en forma de estrella y en cada punta está la semilla o granos para ser cosechados y transportados en jabas plásticas o de cartón.
El ingeniero Herrera Rojas destacó que el Sacha Inchi es una de las especies más dinámicas en función del manejo económico, ya que entre los espacios de tres metros entre plantas se pueden cultivar otras especies como maíz, arvejas o soya. «Tenemos un marco con diferentes posibilidades de cultivos», señaló.
El especialista recalcó que es necesario elaborar un calendario de siembra y cosecha, además de contar de antemano con un mercado que sea el destino de la producción.