RCR, 06 de febrero de 2023.- Las distintas realidades, las exclusiones, las poblaciones insatisfechas, ha brotado bruscamente por el enorme deterioro de la clase política y su capacidad de ofrecerle respuestas a la gente. Ahora estamos frente a una situación donde la población exige respuestas en temas básicos como el cierre del Congreso, renuncia de la presidenta y un adelanto de elecciones donde el Parlamento  está demostrando una incapacidad absoluta, manifestó el exjefe del Gabinete Técnico de la Presidencia de la República, Raúl Molina.

En declaraciones a Red de Comunicación Regional (RCR), Raúl Molina,precisó  que el país requiere de un reencuentro en medio de la crisis social y politica. Declaró que era difícil contribuir en el proceso de pacificación desde el Ejecutivo.

«La presidenta me encarga a medida que va empeorando la situación armar un dialogo, y se trató de realizar. El problema se hizo visible en medida que van pasando las semanas, cada vez que intentamos, el viceministro de Gobernanza Territorial de la PCM o la secretaria de Gestión Social y Diálogo donde había más indisposición de la gente como Puno, Cusco y Apurímac, éramos permanentemente rechazados y amenazados por ser parte del Gobierno, es ahí donde nos quedamos sin interlocutores», resaltó.

Remarcó que tras las oposiciones de los gobiernos regionales, decidieron tratar de convencer a otros actores que asuman el liderazgo para proponer un diálogo y mediar entre los actores del Estado.

«El problema es que es convencer voluntades de terceros. La perspectiva de la presidenta por la presión la situación,es que  ella quería resultados rápidos en términos de que tuviera instalada mesas de dialogo, sin embargo, al tener un Ejecutivo deslegitimado, al tener un número de muertes tan alto, la respuesta es más difícil», recalcó.

Por otro lado, Molina señaló que el Congreso de la República necesita tener una discusión más amplias respecto a las reformas que necesita el Estado. Asimismo, indicó que es importante que el Gobierno mantenga una relación en buenos términos para convocar un diálogo conjunto.

«Nos hemos negado a hacer una descentralización de verdad, hoy el Congreso tiene una discusión superficial sobre las reformas que necesita el Estado. No podemos discutir reformas del Parlamento, si no discutimos reformas regionales y municipales, así como discutir reformas del sistema administrativo del Estado: inversión pública, contrataciones y adquisidores y control. Necesitamos una discusión mucho más amplia, y se debe hacer usando este periodo de transición», subrayó.