RCR, 13 de Diciembre 2021 .- Herberth Cuba García, especialista en políticas de salud pública y columnista del portal El Montonero, dijo que la obligatoriedad de contar con carnet de doble vacunación para ingresar a locales cerrados es una medida que no es necesaria. Explicó que debido al alto nivel de informalidad esa obligación va a caer en saco roto.
“El problema no está en el requerimiento del carnet o no, el problema es que llegue la vacuna a esos lugares. El nivel del 70% de vacunación que el Perú tiene, demuestra que en el Perú los grupos antivacunas no son importantes y son minoritarios. Desde el punto de vista sanitario, las medidas coercitivas no son necesarias. Además, la presentación de este carnet va a ser flor de un día, porque después por el alto nivel de informalidad esto va a caer en saco roto”, dijo.
Señaló, en declaraciones a Red de Comunicación Regional (RCR), que el Gobierno debería fortalecer la voluntariedad, la participación activa de la población, el trabajo en la comunidad, la vigilancia social, el autocuidado, medidas más proactivas en lugar de ser coercitivas. “Esta modelo continúa con el modelo hospitalario militar policial. Esto es un mecanismo que no se ajusta a la realidad peruana”, indicó.
“Desde el punto de vista legal hay un inconveniente, hay una ley que se ha dado en la pandemia y esta ley dice que la vacunación es voluntaria. Por lo tanto, con un decreto supremo no puedes violar una ley que se dio para la pandemia. Haría bien el Gobierno en ajustar la ley, porque el limbo jurídico va a generar a que los que se oponen a esta norma ilegal o inconstitucional”, agregó.
Observó que el comunicado de uno de los firmantes señala que ahora el concepto de estado plurinacional pone en riesgo la soberanía nacional, al recordar que el mismo plan de gobierno de Perú Libre señala que se busca en el Perú un estado plurinacional.
Remarcó que una de las grandes críticas contra el expresidente Vizcarra, el expresidente Sagasti y el presidente Castillo, en relación a la lucha contra la pandemia, es considerar prácticamente que todo el país es uniforme, al aplicar política estandarizadas, con miradas muy homogeneizadas, como que el modelo de Lima se pueda replicar en todo el país.
“Las consecuencias son que las comunidades nativas originarias, las poblaciones altoandinas, las poblaciones dispersas del país han sido dejadas de lado, a tal punto que el Gobierno se jacta de haber llegado al 70% de la población, que ya está vacunada, pero estas poblaciones nativas hasta hace un mes no tienen el 10% de vacunación”, anotó.
Advirtió que, si no se hace una política de interculturalidad masiva, si no nos damos cuenta que el país es diverso y aplicamos políticas diferenciadas en función de la población, no vamos a resolver la cohesión social que el país necesita. “El país es unitario, según la Constitución Política, pero esa unidad tiene que ser construida desde la diversidad”, apuntó.
“Esa alerta tiene que ver con las coberturas de vacunación que tiene Puno y Puno tiene la más baja cobertura de vacunación. Si uno va a la zona aimara, ahí las condiciones sanitarias están peor. La reivindicación es legítima, pero tiene que ser encaminada en la fortaleza de un estado unitario, pero no en su ruptura”, subrayó.
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