RCR, 17 de agosto de 2020.- José Luis Gil Becerra, exjefe de la Dirección Nacional de Inteligencia y exmiembro del Grupo Especial de Inteligencia (Gein), lamentó que el premier Walter Martos haya nombrado como viceministro de Gobernanza Territorial a Paulo Vilca Arpasi, quien es un conocido personaje que tiene una posición política e ideológica contra la minería y puede frustrar todas las inversiones en dicho sector.
“Ha sido nombrado Pablo Vilca Arpasi como viceministro de Gobernanza Territorial, pero para todos es claro que ese funcionario tiene una fijación para anular todas las concesiones y someterlas a consulta popular. Cómo es posible que estas personas, que son en el fondo antimineras y tienen una agenda ideológica y política, el Gobierno las nombre en altos cargos donde pueden manipular o influenciar como autoridades”, indicó a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
“Él ha participado en diversos foros en los que su posición ha sido clara respecto a que a todas las concesiones hay que someterlas a consulta popular de manera indiscriminada, incluso las anteriores (las que ya han sido otorgadas). No sé cual es el sentido de poner a una persona que más que equilibrar la balanza la va a poner más para el lado antiminero, antiproducción. No sé si el premier tiene conocimiento que además es cercano a la red Muqui”, remarcó.
El nombramiento de Vilca Arpasi demostraría que los operadores antimineros están insertados dentro del Estado. “Han venido trabajando y han venido insertándose en el Gobierno, en los ministerios, en el Congreso, en los gobiernos regionales, entonces son un grupo de presión y poder diseminado en todos los niveles del Estado, de tal forma que cuando se quiere realizar una verdadera investigación contra estos organismos la cosa se frustra y sale un ataque furibundo del lado de la izquierda”, resaltó.
En ese sentido, aseveró que las ONG (Organizaciones No Gubernamentales), son organismos que actúan, a través de operadores políticos, para sabotear las inversiones mineras. “El verdadero sentido de estos grupos es frenar el desarrollo del Perú y esto lo hacen a través de ONG, que están conectadas con una red mundial que tiene que ver con este nuevo discurso del socialismo del siglo XXI en el que todo tiene que ser manejado y controlado por una sola corriente ideológica exclusiva”. “Estas personas están trabajando en cada uno de los emporios mineros y petroleros y en todas las áreas productivas ellos van a estar instalados para impedirlo o tratar de sacarle el máximo provecho”, anotó.
“Para nadie es un secreto que detrás de estas organizaciones no gubernamentales, que están metidas en la vida política, social, económica y productiva del país, tienen un gran operador ideológico y político que hace que dominen a estas ONG”, remarcó. Insistió en que “es demostrable que estas ONG promueven, instigan y llevan a los comuneros o a los indígenas a darles una narrativa que al final termina siendo la única narrativa que impera en la zona. Por lo tanto, vas a tener un nivel de violencia alto”.
“Como es posible que la sociedad organizada no pueda dar una respuesta ideológica y política, que este fundada en los más altos intereses del país y no en los intereses de una corriente mundial socialista. El Perú está en una situación difícil por esta pandemia y los que nos puede dar recursos para sobrevivir como la minería es lo que está en riesgo por esta narrativa socialista”, manifestó.
Perú enfrenta amenazas graves
En ese contexto, Gil Becerra advirtió que el Perú enfrenta 10 amenazas muy graves a su estabilidad, a su economía y a la paz social. “Una de las 10 amenazas se llama conflictividad social, porque ya se ha entendido desde hace un buen tiempo, por lo menos desde los organismos de inteligencia, que la conflictividad social en el país no solo es un problema social y que cada uno de estos problemas es aislado, sino que proviene de una lógica”, dijo.
“Hay lógicas diversas, hay una lógica ideológica, hay una lógica política, hay una lógica económica y hasta una lógica criminal y estas lamentablemente han confluido en nuestro país, promovidos todos por operadores o ideológicos o políticos o económicos o hasta criminales o todo junto, que es lo peor”, explicó.
“Por ejemplo, en el caso de Las Bambas, donde cualquiera pudiera pensar pobrecitos los campesinos, pero no dicen cuántos campesinos han sido beneficiados con 1 millón y medio de soles en efectivo cada uno y que el problema de Las Bambas no fue un problema social producto de las necesidades básicas, porque lo que querían era una nueva cobranza contra las mineras por el derecho de pase. Han logrado volverle a meter la mano en el bolsillo a las empresas. Estas circunstancias nos obligan a repensar bien que cosa hay que hacer con estas organizaciones, que cosa hay que hacer para que los actores actúen en equilibrio”, precisó.
Dijo que “ellos toman lo que les conviene de todos los procesos de conciliación como las famosas mesas de diálogo, pero no toman en cuenta que para que haya mesas de diálogo tiene que haber previamente espacios de diálogo y previo a eso están las condiciones para el diálogo”. “Ellos no han creado el espacio del diálogo y no les interesa las condiciones del diálogo, pero si quieren armar una mesa de dialogo, porque justamente en estas mesas ellos pueden descargar todas sus exigencias y presiones y finalmente hacen firmar actas”, subrayó.
“En los últimos 20 años se han firmado actas en estas mesas de diálogo, que han comprometido casi 16 mil millones de soles en cosas que no se van a poder cumplir. Es hora de ir por el camino correcto: voluntad de dialogo, espacio de diálogo y condiciones para el dialogo. No vamos de frente a la mesa de dialogo, donde ya sabemos que a punta de presión nos van a hacer firmar estos 16 mil millones de soles, arrinconando al Estado y a la empresa”, puntualizó.