El agua potable es lo único que puede salvar la vida de los niños y ancianos de la comunidad. En la zona hay más de 60% de anemia y desnutrición infantil por enfermedades parasitarias, diarreicas y febriles, ocasionadas por consumo de agua que no es apta para el ser humano.
RCR, 14 de mayo 2018.- “Han pasado 30 años desde que se fundó la comunidad y hasta ahora, todo nos sale mal. Cada vez que queremos realizar un proyecto que beneficie a toda la población, de la mano con empresas que aporten los recursos de inversión necesarios para llevarlo adelante, trabajando juntos en armonía y con respeto, un grupo de gente se opone, vociferando mentiras, y nunca dejan que se haga algo bien para la comunidad”.
José María Carmen Ancajima, delegado del anexo Angostura de la Comunidad Campesina apóstol San Juan Bautista de Locuto – Tambogrande, expresó así su indignación por la intransigente, y a veces violenta, oposición de un pequeño grupo de dirigentes radicales contra los proyectos de agua y desarrollo que se ejecutan en la zona.
La comunidad necesita urgentemente disponer de agua potable de calidad que garantice una buena salud y mejore la calidad de vida de todas las personas, así como también se requiere para desarrollar proyectos agrícolas que permitan generar una cadena productiva con puestos de trabajo, desarrollo económico, y aumento de ingresos para todos. Sin embargo, hay gente que no quiere que se haga nada, y se oponen a todo a pesar que no tiene nada que ver en la comunidad, señaló.
En ese sentido, destacó la gestión de la Mesa de Inversiones que promueve la Gobernación Regional de Piura y respaldó el trabajo que viene llevando a cabo el presidente de la Junta Directiva comunal, Albino Vicente, para concretar el desarrollo de Locuto a través del diálogo y lo instó a seguir trabajando en bien de la población, junto a su comunidad.
ATAQUES CONTRA LOS MÁS POBRES
Carmen Ancajima recordó que el pasado domingo 13 de abril, en asamblea general de la comunidad se aprobó realizar, con el apoyo de la Mesa de Inversiones, los estudios geoeléctricos en todos los anexos de Locuto, para ubicar los puntos en los que podría existir agua a ser usada en consumo humano y proyectos agrícolas.
No obstante, cuando se llevaban a cabo los estudios, una turba contratada por algunos malos dirigentes atacó con armas de fuego a los ingenieros de la Universidad de Piura, secuestró a una geóloga, destrozaron la maquinaria y los equipos, impidiéndoles realizar el trabajo.
“Hace unas semanas, se instaló también una planta piloto de desalinización y purificación de agua para el anexo Angostura. Mientras los técnicos extraían el agua limpia y la mayoría de comuneros estaba atento y contento, un pequeño grupo opositor comenzó a vociferar también contra esta instalación”, señaló.
El proyecto de la planta fue gestionada también a través de la Mesa de Inversiones. “El agua potable es lo único que puede salvar la vida de los niños y ancianos de la comunidad. En la zona hay más de 60% de anemia y desnutrición infantil por enfermedades parasitarias, diarreicas y febriles, ocasionadas por el consumo de agua que no es apta para el ser humano”, remarcó.
Por ello, anunció, en la próxima Asamblea general de la comunidad se ratificará los acuerdos aprobados en abril para continuar los estudios geoeléctricos a fin de concretar el proyecto de agua segura y de proyectos productivos que brindarán trabajo a todos los comuneros.
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