Ing. Celfia Obregón Ramírez, Presidenta de la Asociación para el Desarrollo Sostenible del Perú ADERS Perú | Directora Ejecutiva del Centro de Innovación Productiva y Transferencia Tecnológica – CITE Papa y Otros Cultivos Andinos.
Perú se escribe con P de papa, pues fueron los antiguos peruanos quienes domesticaron la papa hace más de 10,000 años para todo el mundo. Falta promoción en el país para elevar su consumo.
RCR, 13 de febrero 2018.- De acuerdo a estudios realizados en Universidades de EEUU, la papa es un súper alimento que no se aprovecha adecuadamente, sobre todo en la primera infancia, para combatir la desnutrición infantil crónica y la anemia, sostuvo Celfia Obregón, presidente de ADERS Perú y directora ejecutiva del CITE PAPA.
“Sería muy favorable para el crecimiento y desarrollo de la niñez peruana, que luego de seis meses de lactar leche materna, pasen a comer papilla, como su nombre lo indica, de papa, pero lamentablemente esa costumbre se está perdiendo en nuestro país”, acotó.
Precisó que la papa se cultiva en 19 regiones del país desde el norte, en la sierra de Piura, Cajamarca hasta Puno en el sur; incluso en zonas de la Amazonía. Además, nuestro territorio conserva más de 150 especies silvestres de papa, que se constituyen en un valioso tesoro que puede ser empleado para el mejoramiento genético de los cultivos.
“La papa se siembre desde el nivel del mar hasta los 4,500 m.s.n.m., en una superficie promedio de 260,000 hectáreas involucrando aproximadamente a más de 700 mil familias en todo el país, según el censo del 2012, y cuya producción representa alrededor del 14 % del PBI Agrícola, mayor que cualquier otro cultivo alimenticio nacional”, señaló Obregón Ramírez.
PER CÁPITA
En torno a los hechos ocurridos recientemente, relacionados con la huelga de los productores de papa, quienes acusaron un brutal derrumbe en los precios de sus productos debido a una presunta sobreproducción de papa en el país, la especialista rechazó dicha postura, señalando que el problema principal había sido la disminución en el consumo del tubérculo.
“El problema que se produjo no se debió a una sobreproducción de papa, ni los efectos del Niño Costero, ni el cambio climático, ni la importación. Son otros factores, más relacionados con la reducción del consumo, así como la escasa promoción y difusión de sus ventajas alimenticias”, anotó.
Explicó que a lo largo de los últimos 50 años, parte de la población había bajado el consumo de la papa en su dieta diaria reemplazándola por otros productos, a pesar que estos no tienen sus bondades alimenticias.
“Existe un indicador muy importante que se usa siempre para medir este problema, es el consumo anual per cápita. En la década del 70’, cuando la base alimenticia de la población era papa-granos –pescado, este índice era de 140 kg/papa por habitante año, pero para el 2005 cayó hasta los 55 kg.”, señaló.
El 2005 fue un punto de quiebre, pues se instituyó el 30 de mayo como el Día Nacional de la Papa por Resolución Suprema Nº 009-2005-AG., con el objetivo de incentivar su consumo, reforzando su identidad, y mostrando que se trata de un producto 100% peruano, que se ha convertido en fuente de alimento de todo el mundo. A fines del 2017, el consumo per cápita se situó en 89 kg por persona/año, logrando un crecimiento lento pero sostenido.
La presidenta de ADERS Perú indicó que, en su opinión, la producción de papa el año pasado estaba en niveles relativamente normales, pero que solamente se habían producido problemas con algunas variedades del producto, principalmente con la Nativa Única.