Fotografía: Agencia Andina
RCR, 27 de septiembre de 2020.– León Trahtemberg, educador y conferencista del conversatorio “Bienestar socioemocional de los estudiantes en la educación a distancia” de la Derrama Magisterial, señaló que ningún gobierno, en los últimos 40 años, le ha dado prioridad a la educación. Destacó que en las próximas elecciones los peruanos tenemos la oportunidad de elegir como jefe de Estado a alguien que exprese verdadero interés por este sector.
“En los últimos 40 años que vengo observando la vida política del Perú, no he encontrado ningún gobierno que ponga prioridad la educación. Cada gobierno termina culpando al anterior de todos los males que hay y trata de ponerle un salvavidas al sistema educativo, ver como lo hace flotar para que no se hunda y no es que este apostando por una restructuración total del sistema para convertirlo en un activo estratégico del país”, dijo.
En declaraciones a Red de Comunicación Regional (RCR), indicó que “este gobierno lo que va a hacer es tratar de terminar como pueda este periodo y hay que tener en cuenta que se vienen las elecciones”. “Si queremos que haya un cambio, se debe empezar pensando quien puede ser elegido alcalde, regidor, gobernador regional, presidente de la República. Ahí tenemos la oportunidad de hacer una reforma, con gente que se ocupe de replantear la educación y que sea éticamente honesta”, subrayó.
Remarcó que el gran problema está en saber cuánto les importa de verdad a los gobernantes la educación, porque lo consideran un tema marginal en los discursos políticos, en los planes de gobierno, en las iniciativas gubernamentales. “Generalmente todo el mundo dice y habla de ‘educación de calidad’, pero en realidad no están dispuestos a comprarse el pleito”, resaltó.
Pandemia hizo visible crisis
Expresó que lo que ha ocurrido en esta temporada de la epidemia del COVID-19 es que se ha hecho más visible aquello que ya se conocía de antes. “No es que han aparecido problemas que no existían, lo que ha ocurrido es que se han amplificado, porque hay una gran cantidad de peruanos que no pueden desarrollar su año escolar de manera regular, porque no tienen acceso a la escuela y ni siquiera acceso a internet y computadoras como para tener esta especie de sustituto temporal”, manifestó.
“Por ejemplo, el vínculo emocional entre un alumno y el maestro es fundamental para el aprendizaje. El alumno aprende cuando quiere, no cuando el profesor quiere. Si deseo que el alumno aprenda, necesito crear las condiciones para que se sienta acogido, protegido, seguro, cómodo y que entienda que el maestro que está con él está interesado por su vida, por su persona y entonces puedo dedicar mi energía para aprender como alumno”, puntualizó.
Mencionó que se sabe desde hace tiempo que un niño que tiene problemas emocionales y psicológicos obviamente no va a rendir bien en la escuela. “Lo que ha ocurrido ahora es que se ha amplificado, se ha hecho más notorio y la cantidad de niños que tienen estrés, angustia, depresión y problemas mentales se ha incrementado, porque ni siquiera tiene acceso a la escuela, sino que tiene que arreglárselas con todas las dificultades que eso implica”, precisó.
“No es novedad que hay una gran cantidad de alumnos que van a la escuela y no aprenden nada o que vienen de hogares que no contribuyen a ponerlo en condiciones para sacar provecho de su vida escolar. No es novedad que gran cantidad de alumnos abandonan la escuela o simplemente la terminan sin haber aprendido casi nada. Lo que ha ocurrido es que hay una mayor visibilización de los temas que ya se conocen desde antes”, observó.
Expresó que “cuando se habla de padres daría la impresión que hay un modelo, un estereotipo de padre dominante”. “Uno a veces opina genéricamente, pero en realidad el universo de padres es enorme, entre padres muy comprometidos que hacen todo para dedicarse a sus hijos hasta padres que son tan indiferentes y distantes y lejanos que no tienen idea de lo que está pasando con sus hijos”, aclaró.
Maestros y padres aliados en la educación
Planteó que maestros y padres tienen que sentirse como aliados. “Si va a haber reproches entre ambos se generarán conflictos que perjudican a los alumnos. Lo primero a tomar en cuenta es una buena alianza. En segundo lugar, hay que comprender que estamos ante una situación atípica nunca antes vista, que complicada mucho la situación de cada maestro, pero también de cada alumno y de cada familia”, explicó.
Aseveró que en este intento por sacarle provecho al año escolar hay que hacer acomodos y adaptaciones. “Las familias, cuyos padres están en casa, los que salen a trabajar, los que tienen computadora y los que no tienen y los que comparten con sus hermanos, los que no tienen acceso a internet, es decir hay una diversidad de situaciones en el hogar que los maestros tienen que tomar en cuenta. Pero los padres también tienen que mirar la situación de los maestros que tienen la función de ser padres de sus hijos y, a su vez, maestros de otros niños”, dijo. Subrayó que el maestro hoy día necesita aire, necesita oxígeno, necesita apoyo y padres que puedan ser comprensivos.
Respecto a las brechas en las zonas rurales, sostuvo que son situaciones que vienen de antes. “El hecho de los chicos de las zonas rurales que están en desventaja, es algo que se conoce desde el inicio de la República. Lo que ha ocurrido es que los sucesivos gobiernos no le han puesto atención a los más vulnerables, entonces este año aparece de manera mucho más radical, porque ni siquiera tienen los libros que se reparten a principio de año y acceso a televisión y radio”, manifestó.
Comentó que le llama la atención que a pesar que los maestros hacen el esfuerzo de conectarse, aunque sea por celular, las Ugel les reclaman que produzcan sesiones de aprendizaje y cumplan con sus horarios y una serie de gestiones, cuando ahora están trabajando más que antes. En lugar concentrar energías en conectarse con sus alumnos, los maestros tienen que estar perdiendo el tiempo en cumplir con estas reglas administrativas que en un año como este terminan siendo absurdas.”, comentó.