RCR, 11 de diciembre 2017.- Los últimos decretos supremos que ha emitido el Ministerio del Ambiente (Minam) son una verdadera alternativa de solución a la difícil problemática que durante años ha venido arrastrando el pueblo de La Oroya ante la paralización de su Complejo Metalúrgico, pues abren una puerta para proceder al reinicio de operaciones y su venta a un nuevo operador en un futuro próximo, sostuvo Georgina Ríos de Nestares, consejera regional por la provincia de Yauli, en Junín.

Según analistas consultados, las nuevas disposiciones del Minam respecto a la gestión y remediación de sitios contaminados y pasivos ambientales en actividades extractivas de minería y petróleo, establecen la posibilidad de que quien se adjudique la buena pro en el concurso internacional para adquirir las instalaciones del Complejo Metalúrgico de La Oroya (CMLO) ya no estaría obligado a hacerse cargo de los pasivos anteriores en la zona.

A través del Decreto Supremo 012-2017-Minam, el ministerio indica que, en caso de determinarse la existencia de sitios contaminados por una actividad pasada, el titular del proyecto o la actividad en curso no tiene la obligación de continuar con su evaluación y posterior remediación, salvo que sea el responsable de esa contaminación o haya asumido la remediación del sitio mediante acuerdo contractual con el responsable del mismo.

La consejera señaló que la norma no tiene nombre propio, pues pueden acogerse todas las empresas que tengan problemas con pasivos ambientales anteriores a su gestión. De acuerdo con el dispositivo legal, se precisa que quien contamina es el que tiene la obligación de remediar el suelo, por lo tanto, en el caso del complejo metalúrgico, le correspondería al Estado, a través de la  empresa estatal Activos Mineros (por la época en la que Centromín fue el operador), y a Doe Run Perú en liquidación, por los años que se encargó de las operaciones de fundición, quienes  asumirán las remediaciones a la fecha de la subasta en las zonas urbanas y rurales de la provincia de Yauli.

Georgina Ríos afirmó que solamente esta modificación generará un mayor atractivo por participar en la subasta de este activo en el mes de marzo del próximo año, pues era un factor clave que demandaban los potenciales compradores.

Reveló que los trabajadores del complejo, las autoridades y el pueblo en general, en una acción conjunta, están solicitando la reactivación inmediata de las líneas de plomo y zinc, para que ingresen a operar al 100% a partir de enero del 2018, antes de la subasta, lo que le añadiría un atractivo extra a los interesados, que verían con buenos ojos un activo único, en completo funcionamiento.

“Es más, el pedido de los trabajadores es que también se priorice la reactivación de los diferentes talleres que existen en la Planta como los de mecánica, electricidad, y los garajes de maestranza, para que de esta manera se posibilite que el mayor número de trabajadores vuelvan a sus puestos”, explicó.

Finalmente, la consejera señaló que mañana martes 12 de diciembre, se llevará a cabo una reunión en el Ministerio de Energía y Minas, en la cual se evaluarían las mejores alternativas para volver a operar el complejo, entre ellos el plan de reinicio presentado por la administradora Dirige, que comprende un presupuesto de US$ 108 millones.

“Ahora estamos más esperanzados que nunca, después de nueve años de tener que cargar esta cruz tan pesada, ahora nos sentimos más fortalecidos”, finalizó.