RCR, 02 de julio de 2024.- El exdecano del Colegio de Ingenieros de Moquegua, Javier Salazar Muñoz, señaló que los legisladores no deben generar conflictos sociales sino propiciar el diálogo, al referirse a la anunciada llegada a Arequipa de un grupo de congresistas que se oponen al proyecto Tía María. Sostuvo que el proyecto minero Tía María tiene una tecnología que evitará cualquier afectación a otras actividades como la agricultura.
“El rol de una autoridad es que los pueblos se desarrollen. Ese debería ser el punto de partida y oponerse a un proyecto de inversión como Tía María es negativo. Lo que tienen que hacer los congresistas es conversar, unir puentes. Es el rol que le toca a los legisladores y a las autoridades. No les toca generar conflicto sino de servir de puentes de diálogo”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
Señaló que los congresistas al valle del Tambo deberían asumir su rol dialogante y no encender la pradera. “No ponerse al otro lado. Yo veo a los congresistas y a los gobernadores regionales y a las autoridades que su rol está por ahí, de servir de puentes de entendimiento entre las personas que tienen preocupación y oposición al proyecto con las personas que están desarrollando o defienden la posición del desarrollo del proyecto”, indicó.
Enfatizó que hay un buen sector de la población del valle del Tambo que está a favor del proyecto Tía María. “En el valle del Tambo hay institutos, hay universidad, la UNSA tiene una filial y la Universidad Católica de Arequipa también ha puesto una sede en Mollendo. Entonces dónde van a ir a trabajar esos jóvenes. Los jóvenes necesitan trabajo, necesitan que haya oportunidades para que se desarrollen. Más bien deberían ver los congresistas, desde ese punto de vista, para que ahí propicien el dialogo y no el conflicto”, expresó.
También señaló que el Ministerio de Energía y Minas, las autoridades de Arequipa, el gobierno regional, los alcaldes de la provincia y de Cocachacra deberían comunicarse con los dirigentes sociales que no están de acuerdo para hacerles entender que el proyecto Tía María es muy importante para el valle del Tambo, Arequipa y el Perú, porque va a generar desarrollo.
“Tía María no va a reemplazar a nadie. Escuchaba que el ecosistema va a desaparecer y eso es un punto de vista que no tiene sustento porque hay hechos de convivencia ya palpables y visibles en otra parte del Perú y ni qué decir en otras partes del mundo también. Esa es la parte que toca hacer entender a estas personas que se oponen o no concuerdan con lo que estamos a favor del proyecto”, explicó.
Señaló que en el proyecto Tía María lo más duradero y sostenible en el tiempo es el empleo. “Cuando entre en operación el proyecto Tía María se van a requerir como mil trabajadores. Si eso se multiplica por nueve puestos de trabajos indirectos porque la minería es un encadenamiento productivo potente, jala otros sectores como el transporte, la alimentación, hoteles y talleres. Si multiplicamos estos 1000 puestos directos vamos a tener alrededor de 10 mil personas con las cuales se van a generar estos nuevos empleos”, afirmó.
“Por la transición energética va a haber una alta demanda de cobre y poca oferta porque los proyectos no se hacen rápido. Un proyecto minero toma 30 años para desarrollarse desde la exploración. Esa es la oportunidad que tenemos. Ahora si el cobre sube los beneficios podrían ser mayores y pueden ir 800 millones solo en canon minero para la región Arequipa y de hecho la provincia de Islay sería un participante activo de este beneficio económico por la tributación que genera la minería”, subrayó.