El economista Diego Macera, gerente general del Instituto Peruano de Economía (IPE), sostuvo que el Gobierno debe tomar decisiones importantes en estos meses de mayo, junio y julio para preservar los empleos y proteger a las micro, pequeñas y grandes empresas, con el fin de que recuperación económica del país sea más rápida después de superar la pandemia global del COVID-19.

RCR, 12 de mayo de 2020. “Si dejamos que las empresas quiebren estamos rompiendo cadenas de pagos y nos va a tardar muchísimo más tiempo recuperarnos. El esfuerzo tiene que estar en preservar la mayor cantidad de empleos y preservar la mayor cantidad de empresas”, remarcó el economista a través de Red de Comunicación Regional (RCR).

Recalcó que “si nos ponemos las pilas estas semanas que vienen, ojalá haya menos que lamentar en los siguientes meses y años”. “Lo que hagamos esta semana importa mucho, las decisiones que tomemos desde nuestra familia, desde nuestro negocio, desde la autoridad pública, desde los ministerios, desde el Banco Central de Reserva en mayo, junio y julio, va a perfilar en lo que resta del año y posiblemente en los siguientes años”, dijo.

Sobre la crisis sanitaria, indicó que el COVID-19 ha dejado en claro las limitaciones que teníamos desde hace tiempo en la organización del sector Salud. “El año pasado se dejaron de invertir varios millones de soles en infraestructura por problemas de gestión. Se paran tirando la pelota entre el gobierno regional, el Ministerio de Salud (Minsa), la municipalidad”, precisó.

“Al final lo que le importa al ciudadano es tener un servicio operativo. Ha habido una transferencia a los gobiernos regionales, pero parte de la responsabilidad recae también en el Minsa y en Essalud. Hay redes de corrupción operando en el sector Salud, pero hay que priorizar que la atención llegue al ciudadano de la manera más eficiente y barata posible. Hay que pensar en cómo pueden jugar el Minsa y Essalud en pared y pueda haber eventualmente una integración y sobre ese pilar construir una red de atención eficiente”, comentó.

Opinó que “la idea de repartir los víveres a través de las municipalidades no es mala”. “El tema es que no todos los gobiernos subnacionales están en capacidad de hacerlo y algunos tienen problemas de corrupción. Hay que ser bien realista y honesto para definir qué tareas le encomendamos a qué entidades del Estado y su competencia para hacerlo, y en función a eso tomar decisiones”, señaló.

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