RCR, 10 de marzo de 2023.- Teodoro Crisólogo, economista senior del Instituto Peruano de Economía (IPE), dijo que el sector construcción podría caer el 2023 en más de 10% en el marco de una caída general de las inversiones en un 3% por la conflictividad social. Señaló que todavía no hay una recuperación sólida del clima de confianza empresarial en el país.

“La semana pasada hemos revisado a la baja nuestra proyección del crecimiento de la inversión privada para el 2023. De 2.8% de caída ahora a una caída de 3%. El resultado de esta revisión a la baja se explica por lo que ha ocurrido con el gasto de inversión en estos primeros dos meses del año, sobre todo en el primer mes, donde hemos tenido fuertes interrupciones en todas las actividades”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).

Remarcó que, sobre todo, se ha tenido una fuerte caída del sector construcción. “Es uno de los sectores que principalmente nosotros utilizamos para poder estimar el gasto de inversión del sector privado de manera más frecuente que las cuentas trimestrales que se publican cada tres meses en el Banco Central”, indicó.

“El día de hoy se corrobora las cifras con los que vaya a publicar el Banco Central, pero tomando en cuenta la caída del consumo interno de cemento y también la caída de la importación de bienes de capital, nosotros estamos anticipando una caída de la inversión privada en el primer mes superior al 10%”, expresó.

Señaló que el sector construcción es uno de los sectores más cíclicos de la economía. “El sector construcción te ayuda a anticipar hacia dónde va a ir el resto de los sectores de cierta manera y en enero del 2023 desde el IPE anticipamos de que el sector construcción habría caído alrededor de 13% debido a un fuerte retroceso en el consumo interno de cemento, que básicamente refleja la caída de la ejecución de obras privadas, la ejecución de proyectos de inversión grandes”, explicó.

Manifestó que a la caída del sector también se suman otros aspectos. “Por ejemplo, también hemos visto un retroceso fuerte de las importaciones de bienes de capital, que vendría a ser básicamente el gasto en maquinarias y equipo que realizan las empresas, que son parte también un componente fuerte de la inversión privada. E eso también tenemos una caída de doble dígito”, agregó.

“Y eso es básicamente lo que nos explica o lo que nos ha llevado a revisar a la baja nuestra nuestro estimado de caída de inversión privada para este año, porque todavía no vemos en cierta manera una recuperación tan sólida del clima de confianza empresarial, sobre el cual se puedan tomar decisiones mucho más concretas sobre una serie de proyectos que podrían ayudar a sustituir la gran envergadura de algunos proyectos que están finalizando en este momento, como por ejemplo Quellaveco”, subrayó.