RCR, 06 de junio de 2023.– El Colegio de Ingenieros de Junín pidió al Consejo Departamental de Lima del Colegio de Ingenieros del Perú que se respete el proyecto de la Nueva Carretera Central que se desarrolla entre los gobiernos de Perú y Francia, con características de una autopista.
Fred Contreras, miembro del Colegio de Ingenieros de Junín y Coordinador del Comité de Seguimiento del Proyecto de la Nueva Carretera Central, dijo que el proyecto se elabora desde hace trece años por diversas instituciones públicas y privadas de la región.
«El CIP Junín viene trabajando conjuntamente con el Gobierno Regional de Junín, la Cámara de Comercio, toda la sociedad civil, la Comisión Multisectorial, los Frentes de Defensa, la CGTP. Todos se han unido para hacer realidad este corredor logístico, la autopista del centro, desde hace 13 años», detalló.
Agregó que ha sido un trabajo en el que no sólo han trabajado los ingenieros, sino que se ha realizado una labor sostenida, para que en algún momento también el Ministerio de Transportes y Comunicaciones pueda reconocer el trazo.
En declaraciones a Conexión Perú, de Red de Comunicación Regional, indicó que el gremio de Ingenieros de Lima propone el trazo Chutana-Cieneguilla Olleros-Huarochirí-Pachacayo, afirmando que será más corto, lo que no es cierto.
Pero si hablamos, el CIP Lima manifiesta que es mucho más más corto, mentira, porque desde la Chutana hasta Pachacayo son 200 kilómetros y desde Pachacayo a Huancayo hay 70 kilómetros, hasta ahí serían 270, de la Chutana a Lima 50 kilómetros, entonces estamos hablando de 320 kilómetros, entonces no es más cerca y eso va a costar mucho más.
Agregó que el proyecto de Lima solo beneficiará al Valle del Mantaro y a 3 millones de habitantes de la Región y parte del Sur de Lima.
En cambio, la propuesta de autopista de las instituciones de Junín beneficiará a más de 10 millones de habitantes de la Macro Región Centro Oriente y parte de acceso a la Capital de Lima, abarcando la entrada de la Carretera Central donde están conglomerados todos los centros de abastos y los grandes mercados para la capital.
«Entonces, esto tenía una situación estratégica, especialmente cuando llega La Oroya, que es que un un punto neurálgico y de ese lugar se bifurca, no solo hacia Pasco, Huánuco, Ucayali y hasta San Martín, que se vende a ser la macroregión centro-oriente, sino que también a la selva central, al Valle del Mantaro y de ahí a Ayacucho y Huancavelica», destacó.