RCR, 22 de Abril 2022 .- Jorge Luis Montero Cornejo, economista y exviceministro de Minas, advirtió que el Gobierno está ejecutando un doble juego para nacionalizar todas las minas de cobre del Perú, azuzando los conflictos sociales para ahuyentar las inversiones. Manifestó que el 25% de la producción de cobre en el país está paralizada y el Estado está dejando de percibir más de 7 mil millones de dólares.
“En estos momentos casi el 25% de la producción de cobre en el Perú está parada, o sea, 7 mil millones de dólares de ingresos están en riesgo por el bloqueo de Cuajone y Las Bambas. Hay un doble discurso, porque vemos a funcionarios de alto nivel que van a hablar con las comunidades cuando piensan exactamente todo lo contrario. Estas autoridades van para azuzar más y hay un doble juego y es un juego perverso”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
Señaló que si el Gobierno quiere entrar a un esquema nacionalista debe activar los mecanismos políticos que existen para eso y tiene que pasar al Congreso, donde se tendrá que debatir. “Pero entrar al juego de te aburro y te boto y después me quedó con lo que tienes. Hay miles de oportunidades para hacer muchas cosas por el pueblo peruano, pero no así”, indicó.
“Tenemos propuestas políticas que hablan de la nacionalización del cobre. Cuando percibe esta guerra contra las empresas mineras productoras de cobre más importantes es que hay una consigna para evidenciar que la empresa privada ha fracasado y ahora le toca al Estado hacerse cargo de los yacimientos de cobre del país y tenemos que pasar a una nacionalización”. afirmó.
Manifestó que, si tuviéramos eficacia en la gestión pública, podríamos pensar que este es un Estado, que se puede hacer cargo de cosas más complejas como es una operación minera, que trabaja 365 días al año y las 24 horas. “Tenemos una incapacidad para la gestión pública impresionante y que ahora pretende hacerse cargo de la locomotora promotora de divisas y de empleos más importante del Perú”, expresó.
“Esta es una maniobra política absurda, cuando no se han agotado los canales. Es una ambición política para decir que son una potencia. No han conversado con las empresas mineras para tener mayor tributación y un mayor servicio del sector público. No se ha hecho ese ejercicio y no se ha propuesto un objetivo común”, apuntó.
Enfatizó que el sector minero está dispuesto a discutir todo sobre la mesa, pero tiene que proponerse condiciones diferentes, que permitan que las operaciones mineras puedan desarrollarse en una armonía política, tributaria y de cumplimiento de compromisos sociales y ambientales. “Podemos admitir un rediseño de las normas de juego, pero no se puede aceptar estas maniobras para cerrar operaciones y decir que las empresas no pueden y nacionalizar”, precisó.
“Estamos perdiendo 6 mil millones de dólares en exportaciones de cobre por un exabrupto ideológico que no ha sido bien pensado y que no ha sido trabajado con honestidad. Para ser honestos hay que sentarse en una mesa para dialogar. El sector no ha sido convocado para definir nuevas reglas de juego, ni para buscar un acuerdo entre el Estado y sus necesidades y las empresas y sus requerimientos operativos”, remarcó.
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