RCR, 05 de junio de 2020.– Eduardo Escobal, consultor y conferencista internacional en proyectos de inversión en infraestructura y docente en ESAN, dijo que el  Gobierno debe asumir el liderazgo para destrabar importantes obras de inversión que están paralizadas. Señaló que desde hace cinco años existe una brecha de US$ 160 mil millones en proyectos de inversión en infraestructura que está impidiendo el desarrollo económico del país.

“La brecha esta alrededor de $ 160 mil millones y ese cálculo se hizo hace cinco años e implicaba invertir alrededor $ 14,500 millones por año para llegar en el Bicentenario a cerrar brechas a corto plazo de $ 120 mil millones. El tema es que vez de invertir $ 14,500 millones en estamos invirtiendo $ 7,600 millones en el 2019. Las normas han hecho que vayamos hacia atrás”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).

Subrayó que el sector infraestructura es vital para el desarrollo económico. “El sector infraestructura en carreteras es muy atractivo, puertos y aeropuertos pequeños, sector minería, el tema infraestructura en general es atractivo”. “Hay bastante fondos en el mundo que están interesados en invertir, ahora que el mundo está redituando poco, en un proyecto que le de 6% de rentabilidad anual”, aseveró.

“Tenemos inversión adjudicada en inversión privada que está trabada, llámese la línea 2 del metro o la Carretera Central. Podríamos destrabar rápidamente si es que hay liderazgo. La inversión pública vía endeudamiento o emisión de bonos o con las reservas que aún existen, con esos recursos públicos se puede hacer y adjudicar rápidamente. Un informe de Capeco sobre la fase 1 del sector inmobiliario señala que del 100% de solicitudes para entrar a la actividad inmobiliaria solo se había aprobado 25%”, expresó.

Informó que entre el 2002 y el 2015 hubo un avance en la ejecución de proyectos de inversión, pero en los últimos cinco años hubo una caída. “El año pasado fue en el que peor nos ha ido en inversión en infraestructura. En el 2014 alcanzamos un nivel de inversiones que era el equivalente al 6% del PBI para crecer con una infraestructura competitiva que acompañe en el desarrollo económico”, dijo.

“Muchos dicen que vamos a crecer en un 3% o un 5%, pero no dicen cómo vamos a crecer en la infraestructura que soporta ese crecimiento. En los últimos 5 años la inversión pública en infraestructura ha caído en 20%, mientras la inversión privada cayó en 72%. Hay un espíritu controlista y estamos adjudicando estudios, proyectos e inversiones al que menos nos cobra y eso debe ser cambiado por adjudicar las cosas a la mejor propuesta técnica”, afirmó.

Proinversión sin rumbo

Recordó que cuando Proinversion dependía de la PCM las decisiones se tomaban en un un pequeño consejo de ministros y se ejecutaban, pero ahora, al depender del Ministerio de Economía y Finanzas, ha perdido mucha potencia. “Tenemos proyectos de iniciativa privada que antes se podían adjudicar en dos años y ahora se están demorando siete años. Ocho proyectos de hospitales tienen siete años en evaluación”, indicó.

“Tenemos que cambiar el marco legal, cambiar la institucionalidad y recuperar la tecnocracia en Proinversion y tenemos que darle un nivel de independencia importantísimo, porque antes era una de las agencias más premiadas y admiradas del mundo, pero ahora con solo tres adjudicaciones y $ 90 millones al año en planillas y estudios, hay algo que no ha caminado”, dijo.

También lamentó que la Ficht Ratings haya bajado en un punto la calificación del Perú en cuanto a oportunidad de inversiones. “Eso es gravísimo, pero he conversado con unos inversionistas y todavía hay un alto interés en invertir en regiones como Perú, Chile y Colombia, gracias a Dios. Sin embargo, las señales que ha dado el tema de (la suspensión de pagos) de los peajes (aprobado promulgado por el Congreso) son negativas. En una de las carreteras con peaje se ha perdido el arbitraje, eso es malo para la municipalidad, pero es un mensaje bueno (para las reglas de juego de la  economía) pues se ha impuesto las reglas internacionales”, comentó.

“Las señales que ha dado el Congreso no son buenas. Por ejemplo, en el Perú estamos necesitando producción de ciertos productos químicos, medicinas y equipos. Hay países como Estados Unidos donde el Congreso empodera al Gobierno para ordenar a una empresa que produzca lo que el país necesita y se le paga. El Congreso debería ver eso, cómo darle herramientas al Gobierno para tomar decisiones de ese tipo y no estemos a la carrera yendo a comprar oxígeno y respiradores. Creo que el Congreso debería ir viendo eso y no ir reduciendo las horas de trabajo o leyes políticas sobre AFP en vez de plantear una reforma”, manifestó.

Caída de sector inmobiliario

Mencionó además que la demanda inmobiliaria efectiva se ha visto afectada porque mucha gente se ha quedado sin trabajo. “Mivivienda debe retomar el rol articulador para   promover la oferta de viviendas ante la caída de la demanda. También hay muchos proyectos que ya están vendidos, pero que tienen que terminar de construirse. Acá hay un problema porque las medidas sanitarias, que se van a aplicar en las obras, van a impactar en el costo de las inmobiliarias”, anotó.

“El Gobierno va a tener que entrar en algún momento a subsidiar los intereses que estaría dejando de ganar el banco para que haya un periodo de gracia a las personas que han perdido sus puestos de trabajo. Esto es un problema de todos y todos tenemos que sacrificarnos. El Gobierno puede subsidiar una parte y los bancos también deben ceder en sus costos operativos”, subrayó.

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