La falta de empleo, la informalidad, la violencia familiar, el acoso y la falta de oportunidades, entre otros, son algunos de los factores que originan la trata de personas, alertó Edwin Poire, director de la Asociación Fe y Derechos Humanos.

RCR, 7 de junio. En declaraciones a RCR, Red de Comunicación Regional, señaló que en Juliaca y Puno la mayoría de víctimas de trata de personas no denuncian por temor a represalias o porque no encuentran una opción laboral.

En el caso de Juliana, Poire dijo que es una ciudad principalmente comercial y con pocos espacios para laborar de manera formal, por eso los jóvenes se dedican a brindar servicios de mototaxi, la venta ambulatoria o en laborar en locales nocturnos, donde las mujeres son explotadas sexualmente.

Agregó que las organizaciones involucradas en trata de personas amenazan a sus víctimas y en algunos casos tendrían informantes en las instituciones públicas, quienes les alertan cuando se intenta realizar una operación de la policía y fiscalía.

Edwin Poire indicó que la explotación no solo se presenta en locales nocturnos, sino también en casas y establecimientos como restaurantes, donde contratan a jóvenes quienes no reciben un pago por su trabajo.

El director de la Asociación Fe y Derechos Humanos dijo que muchas jóvenes son víctimas de trata de personas tras huir de la violencia en sus familias y para subsistir aceptan ofertas de empleos en apariencia legales pero que luego descubren que son para explotarlas sexualmente.

Poire indicó que la respuesta del Estado para enfrentar el problema es insuficiente, ya que no se cuentan con suficientes refugios para albergar a las víctimas y tampoco ofrece alternativas laborales o de formación técnica.

Finalmente, pidió a las víctimas de trata de personas a denunciar sus casos. En Puno, la asociación tiene su oficina en el jirón Libertad 852, y en Juliaca en el jirón Elías Aguirre 175, interior 11.

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