Fuente: Publimetro
El ministro de Salud del gobierno de Brasil, Luiz Henrique Mandetta, pidió también a la población mantener la calma y aseguró tener las medidas que el caso requiriera.
El ministro de Salud del gobierno de Brasil, Luiz Henrique Mandetta, se manifestó acerca del caso de un ciudadano que llegó recientemente de Italia y dio positivo en el contagio del nuevo coronavirus, el primero en Sudamerica.
“Nos vamos a preparar de la mejor manera pero necesitamos estar tranquilos. Es una gripe, la vamos a pasar y colocaremos todos los archivos en la ciencia”, aseguró en declaraciones para la plataforma de noticias G1.
El funcionario pidió a la población no alarmarse e indicó que el país sudamericano tiene condiciones climáticas diferentes a la de los países en donde se expandió el coronavirus. Por tal motivo, habrá que esperar la reacción de su comportamiento.
“No sabe si el virus se acelerará o desacelerará. Los virus se comportan de manera diferente en el hemisferio norte y en el hemisferio sur», declaró el ministro. “Es un virus que surgió a bajas temperaturas. Puede que no sea el mismo comportamiento. Puede ser para bien o para mal”.
Mandetta también sostuvo que “Brasil es un país de gente más joven y está en el verano. Este es un período poco probable para un virus respiratorio por aquí ”.
El Ministerio de Salud de Brasil realizará una conferencia de prensa para comentar sobre el caso y se ha confirmado también que las autoridades sanitarias tiene un protocolo establecido para afrontar una posible propagación.
“Es un enemigo muy difícil. (…) No hay forma de evitar su entrada a Brasil. Este virus vino de un avión de Milán. No hay manera», observó.
El paciente, de 61 años y residente en Sao Paulo, viajó solo a Italia del 9 al 21 de febrero, a la región de Lombardía donde se han registrado la mayoría de los casos de infección en el país europeo.
Según explicó el ministerio en un comunicado, acudió a un hospital de Sao Paulo porque tenía “fiebre, tos seca, congestión y dolor de garganta”.
La epidemia ha provocado ya la muerte de 2.700 personas en China, donde hay además 78.000 infectados. Fuera del gigante asiático, hay tres docenas de países con casos confirmados y se han registrado unas 40 muertes debido a la epidemia.