RCR, 19 de junio de 2020.- José Enrique Silva Pellegrini, presidente de la Asociación de Industrias Farmacéuticas Nacionales (Adifan), dijo que la recuperación de la salud en el Perú debe ir de la mano con la recuperación económica sin restricciones. Precisó que la industria peruana tiene un alto potencial reactivador por su valor agregado de investigación, desarrollo y tecnología, que van a generar fuentes de trabajo que se han perdido durante la pandemia.
“Esta pandemia va a dejar una secuela, el Perú ya no va a ser el mismo. Para que haya impuestos, tiene que haber valor agregado. Nos hemos pegado un contra suelazo de 40% de nuestro Producto Bruto Interno (PBI). Ya van tres millones de puestos de trabajo perdidos y se van a perder más de acá a fin de año. Pero, eso es momentáneo, porque la fuerza del PBI está en cada persona, no está en las resoluciones porque las capacidades del país no han muerto”, resaltó.
Subrayó que la capacidad laboral más importante del Perú es su industria. “Ahí donde podamos poner industrialización, donde podamos poner una planta de puré de papa, una planta donde se puedan industrializar las cosechas. “La industria farmacéutica tiene mayor capacidad de crecimiento. Nosotros exportamos 50 millones de dólares, cuando otros países vecinos venden $ 2 mil millones en el extranjero. Cuanto nos falta para llegar a esos niveles cuando empecemos a pensar de una mejor manera”, señaló.
Enfatizó que “la principal reforma la hacen las personas, ni siquiera el Estado”. “Con haber tenido educación para la salud y contar con su médico de cabecera va a conseguir conocer más. La mayoría de los tratamientos se pueden hacer en las casas. La enfermedad se agrava con mayor carga viral. Por eso es que médicos jóvenes han hecho enfermedades graves por estar expuestos a la carga viral”, indicó.
Hoja de ruta en salud
Silva Pellegrini anunció que los empresarios farmacéuticos han planteado una nueva hoja de ruta en salud post pandemia. Esta considera cinco pasos: Establecer una historia clínica electrónica contenida en el DNI, fortalecer los servicios de atención primaria, brindar cobertura universal y telemedicina humana, dar educación para la salud, y medir la calidad del servicio.
“Debemos ir a las historias clínicas electrónicas contenidas en nuestro DNI, con seguimiento de la salud de cada peruano desde que nace, que funcione con las más avanzadas herramientas tecnológicas, que controle nuestras enfermedades, nuestro consumo, las prescripciones médicas. Eso va a ser un gran avance”, precisó.
También expresó que “se tienen que fortalecer agresivamente los servicios de atención primaria de la salud”. “Debemos buscar la excelencia, la humanidad, recurrir para ello a la antigua formula del médico de cabecera que conocía las fortalezas y debilidades de los grupos familiares. Además, que todo médico que tenga experiencia clínica reciba una remuneración por ser médico de cabecera de determinados grupos poblacionales”, anotó.
“El tercer punto sería una cobertura universal y la telemedicina humana que debe estar en todo el país y que nadie se quede sin atención médica por falta de dinero”, dijo. Aseveró que “la educación para la salud es fundamental”. “Lavarse las manos no es lo único. Tenemos que basarnos en un proceso de formación en los colegios y universidades para que las personas tengan conocimientos, actitudes y hábitos básicos de cuidado de la salud individual y colectiva. Finalmente, se debe medir la calidad del servicio para incentivar desde la web el conocimiento social para ver si lo que se hace es lo que se necesita”, aseguró.
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