Presidente del Instituto Peruano de Derecho Internacional y Relaciones Internacionales – (IPEDIRI), Miguel Ángel Rodríguez Mackay, descartó los vaticinios apocalípticos sobre el inicio, en el Medio Oriente, de una Tercera Guerra Mundial.
RCR, 6 de enero 2020.- La eliminación del general Qassem Soleimani, responsable militar de la Fuerza Quds de élite iraní, es un gran paso adelante desarrollado por Estados Unidos para afianzar su control total en el Medio Oriente y la zona del Golfo Pérsico, aseguró el presidente del Instituto Peruano de Derecho Internacional y Relaciones Internacionales – (IPEDIRI), Miguel Ángel Rodríguez Mackay.
“En el fondo, lo que busca Estados unidos es un control de todo el tablero del Medio Oriente. Busca un control del petróleo. Ha tenido países progresivamente de su lado, y que antes eran (incluso) enemigos”, subrayó.
En declaraciones a Red de Comunicación Regional (RCR), Rodríguez descartó también los vaticinios apocalípticos sobre el inicio, en el Medio Oriente, de una “Tercera Guerra Mundial”, aunque expresó su preocupación por el estallido de un conflicto regional entre Estados Unidos e Irán, si la escalada continúa y se sale de control.
“Esto parece ser una conflagración de carácter más localizado y específico, como es el caso de Irán y Estados Unidos, (de) lo que sabemos que no han ocultado sus verdaderas pretensiones”, puntualizó.
En todo caso, refirió que si bien Irán está obligado a actuar y responder con cautela ante tan duro golpe que ha significado la muerte violenta de Qassem Soleimani, dijo que la nación persa no le queda otro camino que actuar contra Estados Unidos, porque no hacer nada implicaría doblegarse a la máxima potencia mundial.
“No cabe la menor duda de que Irán buscará una reacción para que ese imaginario colectivo iraní (de confrontación) no se pierda. Es decir, la idea de que Estados Unidos es la oveja negra del mundo a la que hay que contraatacar, etc. Los ayatollahs buscan ese perfil, para no doblegar(se) v perder poder. Por eso, es inevitable que va haber un acto de tensión”, enfatizó.
El internacionalista recordó que esta nueva crisis irano-estadounidenses, saldada por el momento con la eliminación del responsable militar de la Fuerza Quds de élite iraní, Qassem Soleimani, es una de las tantas ocurridas en las últimas cuatro décadas de confrontación entre ambas naciones.
“Ha sido una relación áspera. Una relación difícil entre Estados Unidos y el régimen de los ayatollahs, en Irán. Quizás su mejor momento lo alcanzó con el acuerdo que llegó el gobierno de Barack Obama, con el Consejo de Seguridad (de la ONU), más Alemania. Un acuerdo de un programa nuclear para Irán. Pero que luego fue tirado al tacho por el propio gobierno de Donald Trump”, aseveró.
Sostuvo entonces que ante estas condiciones, y mirando un poco más el escenario global, está claro que los iraníes no se van a quedar de brazos cruzados
“La eliminación del general Qassem Soleimani lo que está traduciendo es que era un hombre clave para la externalización de los objetivos de Estados Unidos en el Medio Oriente. Y (que) al convertirse en ´una piedra en el zapato, ha decidido eliminarlo, en un acto que –por cierto- está al margen del derecho internacional”, anotó.
En ese contexto, advirtió que todavía Irán representa esa fuerza de equilibrio, en el Medio Oriente, y para los Estados Unidos, sigue significando una amenaza para sus intereses en la región.
“Y Estados Unidos sabía que este general era un ´capo´ para movilizar internacionalmente., en toda la región, para neutralizar el influjo, el auge o la arremetida de Estados Unidos. Convertido ese ratio de un verdadero problema para los Estados Unidos, se explica el por qué Estados Unidos ha decidido eliminarlo”, concluyó.
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