Dos de cada tres peruanos sufren este problema.
En la actualidad, el estrés es el gran enemigo de nuestra salud. Diversas enfermedades están relacionadas al estrés, una de ellas el cáncer, está entre las principales causas de muerte en el mundo, refirió el Dr. Mauricio León Rivera, director médico del Centro Detector del Cáncer y cirujano oncólogo de la Clínica Ricardo Palma.
“La sensación de no sentirse apoyado, la carencia de recursos o el compromiso de desempeñar varios roles simultáneamente pueden ser motivo de estrés crónico, lo que genera consecuencias negativas para nuestra salud”, agregó el especialista.
Explicó, que el estrés facilita la aparición del cáncer ya que debilita nuestro sistema inmune haciéndonos más vulnerables a la aparición de tumores malignos en cualquier parte del cuerpo tal como ha quedado demostrado en diversos estudios.
Sobre este tema, la doctora Erika Echegaray, coaching en salud del Centro Detector del Cáncer, expresó que tener la voluntad de incorporar hábitos saludables en nuestra vida es un excelente primer paso para mejorar esta situación. “El objetivo es ayudar al paciente a través de un proceso de auto descubrimiento, donde se buscará encontrar capacidades de la persona que lo ayudarán a cumplir sus objetivos”, remarcó.
En cuanto a las cifras, mencionó que dos de cada tres peruanos sufren de estrés, siendo un problema real en nuestra sociedad. La experta recomendó ejercitar la observación de las señales y síntomas que pueden advertir sobre la presencia de estrés en la persona. “Se sabe por ejemplo que con técnicas para el control del estrés se puede ahorrar desde 650 a 25 mil dólares anuales por paciente considerando que el precio del programa de control del mismo es mucho más barato que una serie de visitas a las clínicas por temas relacionados al estrés”, dijo.
Entre los principales síntomas se pueden mencionar la fatiga prolongada y la somnolencia diurna, así como fallas en la memoria y falta de concentración que llevan a descuidos y a disminución en el rendimiento físico e intelectual de la persona.
La doctora Echegaray, expresó también que otros síntomas comunes son los trastornos relacionados con el sueño como dormir demasiado o sufrir insomnio, padecer dolores de cabeza muy frecuentes o la disfunción sexual. Asimismo, no debemos pasar por alto las contracturas cervicales, el bruxismo o hábito involuntario de apretar los dientes, los problemas digestivos y/o el uso de alcohol o drogas como refugio contra el estrés.