Politólogo Manuel Bernales consideró también necesaria la discusión, tanto al interior de EITI como en el ámbito nacional, de un nuevo enfoque del desarrollo de proyectos de infraestructura y explotación de recursos naturales, basado actualmente en forma exclusiva para las actuales regiones que los producen.
RCR, 17 de noviembre 2018.- La Iniciativa de Transparencia de las Industrias Extractivas (EITI) debería fortalecer las capacidades técnicas de las nuevas autoridades regionales y municipales, como parte del reforzamiento de sus futuras responsabilidad de gobierno y el potenciamiento de sus decisiones en favor del desarrollo de sus respectivas jurisdicciones, planteó el politólogo, Manuel Bernales.
“Dejo esta inquietud, en relación a estas transferencias de gobierno que van a haber, y que no existirán añejos funcionarios por elección popular que no podrán reelegirse. ¿EITI no serviría también para fortalecer capacidades de una determinada región, pasarlos por una capacitación. Eso no es invento del Banco Mundial”, subrayó.
A modo de ejemplo, reveló que hace años que Colombia, como requisito para que sus autoridades municipales asuman sus cargos, las obligan -como requisito sine qua non- a pasar por una capacitación urgente y bien hecha en materia de gestión edil.
El EITI es la Iniciativa de Transparencia de las Industrias Extractivas que surge para tratar de frenar la corrupción que siempre se asocia a la explotación de recursos naturales como minerales, petróleo y gas. Lo que se busca es la vigilancia de los ingresos públicos, así como el uso responsable de los ingresos de la explotación de los recursos naturales.
El objetivo de EITI se orienta a desarrollar una mayor información sobre los contratos, producción, y los efectos de estas actividades. En nuestro país, gracias a esta iniciativa, se ha ido creando informes, bases de datos, páginas web y portales sobre esos sectores para que sean de libre acceso.
En diálogo con Red de Comunicación Regional (RCR), Bernales consideró también necesaria la discusión, tanto al interior de EITI como en el ámbito nacional, de un nuevo enfoque del desarrollo de proyectos de infraestructura y explotación de recursos naturales, basado actualmente en forma exclusiva para las actuales regiones que los producen.
“¿Los recursos producidos en Las Bambas o en Río Blanco son para producir un crecimiento gigantesco de lo que es un canon para esa población que lo necesita, sin duda. Y el resto del país? ¿No es éste un Estado unitario en el que los recursos del subsuelo son los recursos de toda la Nación? Pues bien, el pueblo peruano también tiene derecho de tener parte de esa torta”, enfatizó.
Igualmente, el expresidente del Consejo Nacional del Ambiente (CONAM) indicó que el EITI tiene que plantearse la relación entre la actividad extractiva con el cambio climático. “La pregunta que yo me hago es: ¿cuánto de estos proyectos tiene incidencia en la mitigación del cambio climático? No lo sabemos. Esa es la realidad que estamos viviendo”, puntualizó.
De otro lado, y al referirse al presupuesto general de la República, Bernales consideró que hay dispersión en éste que proviene de un enfoque que se tomó para un estado de cosas anterior: menos población, estado de cosas más pequeño, menos plata, priorización de proyectos.
“La pregunta es porqué. La respuesta, para mí, es por ausencia de un Estado planificador, porque no hay planificación. La Oficina de Planificación que se crea en el gobierno de Toledo no sirve para nada, más que para hacer papeles, documentos y para justificar eventos que dicen que el Perú está yendo hacia la incorporación de la OCDE. Y lo mismo sucede con las oficinas de planificación de los distintos ministerios e instituciones. Lo mismo ocurre en los gobiernos regionales y las municipalidades”, apuntó.