Especialista en temas de política internacional, Miguel Ángel Rodríguez Mckay, estimó también que la gran mayoría de chilenos desean que el reemplazo de Piñera sea por un gobierno programático, al margen de las opciones de derecha e izquierda que han venido administrando el país.
RCR, 30 octubre 2019 .- La convulsión social y la desestabilización en Chile seguirá aumentando a límites intolerables mientras el presidente de ese país, Sebastián Piñera, persista en mantenerse en el poder, sin entender que su pueblo ya no lo quiere más en el máximo puesto de esa Nación, aseguró el especialista en temas de política internacional, Miguel Ángel Rodríguez Mckay.
“Realmente, lo que los chilenos quieren, a estas alturas del partido, es que él se vaya. Nadie lo ha querido. Creo que era un riesgo asumir que, luego de un momento de convulsión, tendría que concluir (éste) con la salida del presidente. No es un buen ejemplo eso para la región… Estas cosas solo pueden calmarse y reducirse con el cambio de hombre. A estas alturas del partido, la vida política chilena está pidiendo a gritos cambio de hombres. Si eso no se hace, me temo que la convulsión va a continuar”, subrayó.
En ese sentido, indicó que cuando la situación del país está estancada y el interlocutor no es válido para continuar al mando del país, “corresponde al presidente (Sebastián) Piñera evaluar sustantivamente las consecuencias de su permanencia”.
Señaló además que son los partidos de izquierda los que están promoviendo la salida de Piñera, y participando de las manifestaciones diarias de protestas en la capital del país, Santiago, y las principales ciudades de Chile.
“Esta fase ascendente, va a ser aprovechada por grupúsculos (radicales). Pero Igual, lo que vale, lo que cuenta en la dinámica del poder, es el estado de cosas. Y el estado de cosas actual es que siguen, pues, los chilenos, imparables en sus quejas sobre lo que está pasando al país”, remarcó.
En declaraciones a Red de Comunicación Regional (RCR), Rodríguez estimó también que la gran mayoría de chilenos desean que el reemplazo de Piñera sea por un gobierno programático, al margen de las opciones de derecha e izquierda que han venido administrando el país.
“Creo que el grueso de chilenos no está buscando un gobierno de izquierda, ni de derecha, sino de un gobierno que sea pragmático y que pueda solventar las necesidades de los chilenos que están bastante postradas”, puntualizó.
Ha sido “sumamente grave” vulneración de servicios de inteligencia de Policía chilena
En ese contexto, el historiador calificó igualmente de “sumamente grave” la reciente vulneración de los servicios de inteligencia de los Carabineros, la policía militarizada chilena.
“Por eso decía que Piñera debe evaluar y poner un paso al costado. Porque los Carabineros son una policía que ha sido sumamente respetados como protectores del orden interno y la vida inter institucional”, apuntó.
Dijo que a pesar del rechazo generalizado, el presidente Piñera busca a toda costa quedarse en el poder, y para ello está apelando a todo tipo de medidas desesperadas, y a otras que no lo son tanto.
“El presidente busca cortar cabezas. Primero a sus ministros y, ahora, a su agenda de la política internacional. Y para deshacerse de una reunión internacional, como la Cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que es prácticamente la vitrina más importante de la existencia internacional chilena, implica que es consciente de lo que significa su cargo de presidente”, aseveró.
Al respecto, y en vista de la crítica situación social que atraviesa Chile y, peor aún, por los temas de la inclusión social y el crecimiento que iban a ser discutidos en la abortada Cumbre de la APEC, Rodríguez expresó que iba a ser un completo desatino que el vecino del Sur se hubiese empeñado en realizar dicho evento.
“(Y) teniendo la reunión del mes de diciembre del COP 25, en las que Chile venía trabajando en forma importante y con gran liderazgo, en el tema de la contaminación ambiental, (ambos) son dos menoscabos en la política internacional chilena, a los que ha recurrido Piñera, solamente para quedarse y calmar las aguas. Dudo mucho que, con esta prescindencia, vaya él a lograr su cometido”, concluyó.
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