Fotografía: Lucidez.pe

RCR, 28 de enero de 2021.- Ana María Choquehuanca, presidenta de la Asociación Pyme Perú, manifestó que el decreto supremo 08-2021, que establece la nueva cuarentena focalizada desde el 31 de enero al 14 de febrero, no precisa la situación de los talleres industriales de manufactura y servicios. Señaló, por ejemplo, que el Gobierno debe establecer con claridad si las pequeñas industrias van trabajar en las noches.

“En este decreto supremo el 08-2021 de la PCM no están considerados los industriales, manufacturas y servicios. Si bien es cierto, refiere a la fase 1 y la fase 2, no la contempla pauteada. Si nosotros nos fijamos, están los centros comerciales, pero lo que tenemos en las pymes son pequeñas industrias de manufactura y servicios. Lo que se quiere es que se tenga escrito, porque cuando el ciudadano tiene que cumplir con algo, es algo que tiene ser escrito dentro de un decreto supremos o una resolución, tiene que estar en el texto y aquí no lo estamos viendo”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).

“En las fases 1 y 2 tienen una serie de procedimientos que se dieron en aquel entonces, pero esos procedimientos valen ahora. Si esos procedimientos valen ahora, las pequeñas industrias que hacen turno de noche, de 6 a 6, van a poder salir de noche. Hay que hacer precisiones, acá se trata de aclarar el panorama, porque consideramos al Estado como un aliado, a pesar de no hacer política de Estado. Queremos tener las cosas claras, porque se requiere de una información detallada y concreta como debe ser”, indicó.

Gobierno no tiene datos sobre las pymes

Señaló que “el gobierno no tiene datos y no sabe cómo les ha ido a las pymes en la pandemia, porque en los gremios nos dicen que hemos quebrado o seguimos caminando”. “En un país que quiere desarrollarse no se trabaja con percepciones, se trabaja con estadísticas. Un Estado se debe a las mayorías. El gobierno trabaja con estadísticas atrasadas, el INEI no tiene cifras actualizadas, no tenemos un mapeo detallado de lo que está sucediendo”, expresó.

“El reactiva ha llegado, porque se podía adherir hasta una empresa de casino, los bancos abrieron las puertas, y ahí teníamos un casino. Estas empresas recibieron 10 millones contra una mype que recibió hasta 30 mil soles. Lo que significaba ahí era la cantidad asignada como un capital recuperable, para que las pymes pudieran seguir en el mercado. Tenemos que tener estadísticas sobre las pymes. No hay una estadística de las pymes y la informalidad está proyectada al 80%, porque no son política de Estado”, subrayó.

Manifestó que “las pymes no dependen del Ministerio de Economía y Finanzas, dependen del Ministerio de Producción”. “Con el nuevo ministro José Luis Chicoma estamos trabajando muchas cosas, pero el ministro tiene limitaciones, sus alcances van a lo que dice el decreto supremo o a las directivas que emanan del gobierno central o lo que diga el Congreso. Nosotros tenemos que tener un acceso directo a todo un mapeo de la realidad de las pymes”, apuntó.

“El tema de la reactivación laboral es otro problema. Las empresas formales tienen un 70% de informalidad dentro de una planilla laboral, o sea tiene RUC, pero no tiene planilla. Estos son aspectos que hay que resolver. Lo único que pedimos al gobierno de turno es que nos dé una información más detallada de lo que va a ser, y que además haya más coordinación. Eso es lo que pedimos que nos aclaren”, observó.

Informalidad aumentaría de 70% a 80%

También dijo que “en el universo de pymes han hablado de dos o tres millones de unidades productivas, pero de todas las que hay el 70% es informal y vamos a una previsión de 80%”. “En el tránsito de la informalidad a la formalidad es algo natural. Ahora estamos en retroceso, porque más bien con la pandemia el tránsito de la formalidad a la informalidad se ha ido incrementando”, puntualizó.

“Estamos hablando de años de retroceso, donde el Estado siempre ha hablado de que hay que ser formales, pero sin incentivos, pero sí había algunos beneficios que ser formal te permite acceder por las facturas a vender a empresas grandes y al Estado. Eso nos motivaba, pero ahora es más fácil pasar de la formalidad a la informalidad. La informalidad es un buen negocio para cualquiera porque no hay carga laboral ni tributaria, no hay nada, pero lo que tenemos que hacer en este momento es tratar de ser formales y no tener empresas de subsistencia del día a día, que se caen y se mueven, se caen y se mueven”, afirmó.

“Tenemos que trabajar con empresas de acumulación, que puedan crecer y tener proyección, los encadenamientos con la gran empresa son muy importantes. Como Pyme Perú estamos haciendo muchos convenios que nos van a permitir que ellos sean nuestros proveedores, para eso necesitamos certificación. Estamos trabajando con el Estado y esperamos que podamos avanzar bastante”, destacó. 

Respecto a la ampliación hasta el 31 de marzo del plazo para acogerse a un conjunto de garantías COVID-19, como es la reprogramación de crédito, reconoció que “es una medida buena”. “Yo le pasaría la pregunta al ministro de Economía para que a su vez le pregunte a las SBS, la Superintendencia de Banca, si va a cumplir con eso. Muchos bancos no lo están haciendo. Con el Reactiva y que ahora seguimos con una segunda ola, yo no sé como va a hacer ese tema del cronograma de pagos establecido, el gobierno está de garante y la banca no pierde”, dijo.

“La SBS tiene que hacer que esto se cumpla hasta el 31 de marzo. El que reprograma sus deudas es porque quiere seguir en el espacio económico y empresarial, porque quiere seguir generando ingresos, y no quiere pasar a engrosar la lista de ambulantes, la lista de informales, la lista de personas que van a engrosar el porcentaje de pobreza y pobreza extrema en el país. De eso se tiene que dar cuenta la banca, porque si la Sunat ahorca y la banca no entiende, lo que están haciendo es contribuir a que esto ocurra”, enfatizó. 

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