RCR,viernes 26 de enero del 2018.-El penal de Yanamayo, ubicado a más de 4500 metros de altura en el Alto Puno podría ser cerrado, o en el mejor de los casos, reubicado fuera de los linderos de la ciudad, por cuanto en la actualidad la presencia de la población penal genera incomodidad entre los vecinos quienes se quejan también por la falta de seguridad, señaló Alberto Quintanilla, congresista por Puno, de las filas de Nuevo Perú.
A través de RCR precisó que la problemática de este histórico penal que albergó a conocidos terroristas y sentenciados por diversos delitos, tiene tres aristas: primero, está situado en un área urbana donde vive gran cantidad de gente, por lo que la infraestructura del penal más la continua entrada y salida de internos, policías y personal del INPE causa molestias entre los habitantes de la zona.
En segundo lugar, su condición de penal de alta seguridad ha originado que se trasladen hacia este lugar a presos de extremada peligrosidad procedentes de otras regiones del país, cuyas visitas suelen tener problemas para albergarse.
En este punto, Quintanilla informó que ha presentado un proyecto de Ley para que los detenidos y sentenciados, cumplan sus condenas en sitios cercanos a su lugar de residencia para evitar el problema de las visitas.
“El proyecto se encuentra en la Comisión de Justicia, a la espera de los informes correspondientes, para luego pasar el pleno, y, si no hay inconvenientes, en mayo podría ser aprobado.
Finalmente, dijo que el Ministerio de Justicia ha informado que tiene un Plan para reubicar los penales, de forma tal que no estén situados cerca a lugares céntricos y con población.