Poblador de Chuquibamba (Arequipa), Modesto Velarde, advirtió que desde la pasada década de los 90, la minería informal e ilegal crece aceleradamente en el país; y en la provincia de Condesuyos esta actividad ilícita se concentra en los distritos de Río Grande y Yanaquihua.   

RCR, 12 de diciembre de 2019.- Las autoridades locales y, especialmente las regionales, especialmente las regionales “no dicen nada”, ni se manifiestan en modo alguno sobre al grave peligro sanitario que se cierne para la población de Arequipa, la existencia y actividad de la minería ilegal en la región, especialmente de los 12 a 15 mil mineros que operan a la provincia de Condesuyos, denunció el profesor Modesto Filiberto Velarde Ampuero, vecino de la localidad de Chuquibamba.

“En la región Arequipa, según algunos datos (confiables), hay unos cincuenta mil mineros, dentro de lo que se denomina la minería informal, ilegal y artesanal. Y según el programa de formalización, alrededor de mil 400 de estos mineros se han formalizado. Mil 400 mineros de 50 mil. Y en la provincia de Condesuyos, pero principalmente en los distritos de Río Grande y Yanaquihua, debe haber aproximadamente unos doce mil a quince mineros”, subrayó.

En declaraciones a Red de Comunicación Regional (RCR), Velarde advirtió también que desde la pasada década de los 90 del siglo pasado, la minería informal e ilegal crece aceleradamente en el país; y en la provincia de Condesuyos esta actividad ilícita se concentra en los distritos de Río Grande y Yanaquihua.   

“Y todos contaminan el medio ambiente, principalmente con mercurio y cianuro. Estos elementos, junto con los relaves, son echados a los terrenos contiguos. Y, lamentablemente, todos estos asentamientos están ubicados cerca a los manantiales y ala quebradas que existen en estas zonas. Y deben estarse echando a los terrenos un aproximado de 400 toneladas anuales de mercurio”, detalló.  

En ese contexto, el poblador chuquibambino cuestionó duramente la Ley que extiende a dos años adicionales, hasta diciembre de 2021, el plazo de formalización de la minería artesanal y de pequeña escala, sancionada por la mayoría fujimorista del reciente Congreso disuelto.   

“Serán dos años más en que se seguirá contaminando de manera descontrolada el medio ambiente. (Tenemos también) los problemas sociales que acarrea este trabajo. Las enfermedades ocupacionales como el hidrargirismo (intoxicación por el mercurio), y la silicosis, en las personas que trabajan por allí. Los mineros, directamente relacionados con esto, como también sus familias, hay síntomas que tienen estos problemas”, alertó.  

Escuchar entrevista…