RCR, 10 de julio de 2023.- Andrés Restrepo, presidente de Mineros S.A., sostuvo que el diálogo entre empresarios y comunidades es una herramienta que permite construir capital social en los territorios mineros. También mencionó que en Colombia existen ejemplos de coexistencia pacífica entre la gran minería y mineros informales.
“El diálogo es la herramienta que le permite a uno aprender y construir lo que se conoce como capital social. Hace que haya más interacciones en la sociedad y cuando uno tenga una necesidad que otro le dé una idea de cómo satisfacer esa necesidad de manera más eficiente y de manera que se genere valor en la región”, dijo en el Jueves Minero “El Dialogo Minero, la Experiencia Colombiana”, organizado por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP).
Señaló que abordar el diálogo con personas que tiene una visión distinta a la propia es clave. “Es duro, porque a veces uno se da cuenta que tenía una visión que era equivocada. Nosotros siempre habíamos visto la pequeña minería como un invasor, pero, la respuesta fue muy cierta y ellos dijeron que no hay dónde hacerla y yo me di cuenta en estas conversaciones del GDIAM que eso es verdad”, indicó.
Mencionó que en Colombia hay varias experiencias de coexistencia minera con sectores de la actividad informal. “Hay experiencias de coexistencia minera que tienen origen en invasiones, en empresas mineras que estaban operando y fueron invadidas por mineros artesanales o por personas que querían dedicarse a la minería en ese territorio y que luego para manejar la situación de hecho que se produjo por esa invasión se han ido desarrollando estrategias que permiten coexistir”, precisó.
“Una primera de ellas que es la experiencia de Zijín, que era Continental Gold, que es una mina muy nueva, que se vendió a inversionistas chinos y que fue invadida desde el comienzo de su operación y eso ha generado mucha tensión y muertes. Lo que ha sucedido aquí es que se han ido creando como subcontratos de formalización y se ha ido construyendo una relación de coexistencia entre las dos partes y hay 363 personas beneficiadas y han producido 3600 onzas de oro sin uso de mercurio en esa en esa mina”, expresó.
Señaló que el problema en Colombia es completamente distinto en Perú. “Estoy seguro que es completamente distinto en diferentes regiones de Perú. En Colombia dijimos hagamos un subcontrato minero y lo tuvimos en el 2015 y nos demoramos desde el 2015 al 2019 viendo como operaba ese único subcontratista para pulir el modelo y empezar a vincular otros y ahora tenemos ocho y tenemos 360 personas trabajando directamente con nosotros”, declaró.