Fotografía: camiper.com
RCR, 14 de marzo de 2022.- Iván Arenas, analista político, dijo que detrás de los bloqueos de la comunidad campesina de Urinsaya en Espinar (Cusco), contra la minera Las Bambas en el Corredor Minero del Sur están operadores políticos. Señaló que los mismos agitadores han estado promoviendo ataques y atentados contra operaciones mineras en Moquegua, Arequipa y Tacna y que el ministro de Energía y minas, Carlos Palacios, ha expresado que no se puede declarar en emergencia el corredor, como piden las autoridades de Apurímac, porque casi toda esa zona votó por el presidente Pedro Castillo.
“Están asesorados por ONG y organizaciones medioambientales, que también los podemos ver en Moquegua, Arequipa y Tacna. Estuvieron en Tía María, contra Quellaveco y contra otras operaciones mineras. Estamos con personajes que están asesorando a estas comunidades para llevar agua a su molino”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR)
Manifestó que los bloqueos en Urinsaya continúan desde hace 18 días. “En estos momentos no pueden pasar los camiones transportadores de concentrados y de insumos para la mina. Lo que están reclamando algunos dirigentes es que Urinsaya sea reconocida como un área de influencia directa de la empresa minera. Ellos dicen que deben tener los mismos derechos que Challhuahuacho, pero Urinsaya se encuentra en otra provincia, en otra región y a más de 250 km de la operación minera”, indicó.
Señaló que el 10 de marzo se realizó una mesa de trabajo, con Las Bambas y el Estado, donde asistió el ministro de Energía y Minas, quien ofreció que Urinsaya sea considerada una parte especial. “No reconocida como área de influencia directa o indirecta, porque la normativa no lo considera, pero como área especial para temas de desarrollo, de empleo. Sin embargo, ha sido rechazado, porque quieren ser reconocidos como área de influencia directa ambiental”, explicó.
“Hay un asesor que perteneció a la planilla de abogados de la ONG Derechos Humanos Sin fronteras, muy conocida que está en la zona. Aquí el problema es básicamente la comunidad, porque la empresa minera ha ofrecido una serie de contribuciones sociales. Sin embargo, han sido rechazadas. Entonces el problema no pasa por temas de desarrollo, inversión social productiva, sino intereses subalternos de algunos dirigentes, asesores y ONG”, expresó.
Enfatizó que es difícil saber cuándo va a terminar el conflicto en Urinsaya y en otras comunidades. “Ayer ha habido una paralización en Challhuahuacho, Cotabambas. No existe una estrategia conjunta del Gobierno para reducir los conflictos. Mañana van a ser otras comunidades y vamos a estar en una especie de polvorín constante”, subrayó.
Corredor Minero sin gobierno
Arenas, sostuvo que existe una especie de incendio en todo el Corredor Minero del Sur por la ausencia del Estado en toda la zona y su incapacidad para cerrar las brechas sociales con los recursos del canon y regalías mineros. “Ahora el tema se pone aún más álgido porque existen intereses subalternos de algunas organizaciones sociales. Algunos candidatos políticos están viendo la posibilidad de legitimarse frente la población en el marco de las elecciones generales provinciales y regionales que van a ser en octubre”, dijo.
Señaló que el Estado no tiene en estos momentos una estrategia de ejecución de las ingentes cantidades de dinero que existe por canon y regalías, en proyectos de desarrollo, como agua potable y desagüe, transportes, educación y salud. “No existe en Urinsaya ningún pedido que tenga que ver con respecto a temas ambientales. Lo que existen son básicamente temas políticos, ideológicos y sociales en el Corredor Minero”, remarcó.
Estado de emergencia
Informó que diversas fuerzas sociales y líderes de Apurímac están pidiendo la restauración de la declaratoria de emergencia en la región, porque hay intereses subalternos de ONG, dirigentes políticos y operadores ideológicos, que han viajado a la zona para promover un conflicto social y sacar beneficios particulares.
“Ahora han pedido que el Gobierno declare como zona de emergencia. Sin embargo, el ministro de Energía y Minas ha dicho que eso va a ser imposible porque Chumbivilcas y casi toda la zona votó a favor de Pedro Castillo. Ahora los reclamos ya no solo son prebendas o beneficio, sino que ahora exigen que el propio Pedro Castillo esté en la zona”, precisó.
Informó que Las Bambas había proyectado tener entre 50 y 58 días de paralización, pero los conflictos han sobrepasado ese tiempo. “Eso había sido el estimado dentro de su plan estratégico para este año, pero tenemos los paros de enero, febrero y este mes. Esa proyección queda pequeña frente a un gobierno, que no actúa y no tiene una estrategia. Sobre todo, frente a un ministerio que no está articulando las demandas”, afirmó.
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