RCR, 25 de agosto de 2024.- David Landa, ecologista y miembro del Colectivo Moyobamba 500 Años, advirtió que la Amazonía peruana se está convirtiendo en una sabana (llanura) debido a que hasta el momento ha perdido el 17% de su cobertura forestal por la tala ilegal y el impacto de las actividades humanas. Alertó que esta situación incrementaría en tres grados celsius el calentamiento global.
“La sabanización de la Amazonía en los próximos años se va a dar porque el 17% de la cobertura forestal del bosque tropical amazónico ha desaparecido hasta el momento y esto tiene una tendencia de seguir aumentando y llegar más o menos al 30% en los siguientes 15 años. Eso sería catastrófico porque ya sería el punto de no retorno”, dijo en “La semana en RCR”.
Explicó que la sabana es una llanura extensa que se caracteriza por presentar escasa vegetación arbórea y abundantes plantas herbáceas. “La Amazonía se caracteriza por tener vegetación profusa y abundante. Es el bosque tropical más importante el planeta y por efectos de la tala y otras distorsiones de origen humano estamos perdiendo la cobertura forestal y está empezando a aparecer estos signos de sabanización”, indicó.
Precisó que la cobertura vegetal y arbórea de la Amazonía sirve para reducir la capacidad de fijación de carbono y con su sabanización se habrá eliminado uno de los más importantes sumideros de carbono del planeta. “El bosque tropical amazónico en condiciones ideales propicia la captura de más o menos 1.3 mil millones de toneladas métricas de carbono anuales”, afirmó.
Manifestó que esta situación produciría un incremento de 0.3 grados celsius en la temperatura global del planeta. “En la temperatura regional sería brutalmente catastrófico porque aquí sí podría incidir en un aumento de 3 grados a 4 grados centígrados y eso sería absolutamente catastrófico porque la capacidad de retención de humedad del suelo también se perdería por el incremento de la temperatura de la superficie”, expresó.
“Si vamos al tema de biodiversidad también es terrible, porque una cosa lleva la otra. En la Amazonía tenemos más o menos unas 40 mil especies de plantas, tenemos 2.5 millones de especies de insectos y muchísimo de ellos son comestibles, son fuentes de proteínas de cara al futuro y se proyecta que gran parte de nuestra alimentación va a venir de insectos”, subrayó.