RCR, 14 de agosto de 2020.- Marco Almerí, médico especialista en salud pública, consideró que el Gobierno está tomando medidas extremas al decretar la inmovilización los domingos. Señaló que los contagios se dan todos los días de la semana y el incremento constante de las cifras se debe a una mala gestión de la pandemia y del comportamiento de la población.
“Ahora estamos frente a una situación en donde el número de infectados no baja y el número de muertos sigue aumentando y nos obligan a tomar medidas más extremas. Estas medidas son extremas, porque solo nos podemos contagiar los domingos y de lunes a sábado no nos vamos a contagiar, nosotros nos contagiamos todos los días de la semana”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
Remarcó que ahora se toma una medida desesperada de cerrarnos las puertas los domingos, porque en esos días hay reuniones familiares. “Bastaría con que se prohíban las reuniones familiares y que existiría una autoridad que lo haga respetar y listo, no tendría que someterse a cuarentena los domingos”, indicó.
“Se supone que estas medidas tienen que disminuir el número de infectados, pero estoy viendo las cifras del número de infectados en las regiones que se han mantenido en cuarentena durante mucho tiempo y veo que las cifras siguen en aumento. Eso en parte es porque no hay un principio de autoridad y la población no es consecuente con esta situación de desgracia que vive el país y es rebelde a los consejos que le damos”, afirmó.
“Una primera cosa que queda claro es que la tan mentada meseta nunca ocurrió y que el número de contagiados y el número de fallecidos sigue subiendo en nuestro país. Es cierto que tiene responsabilidad la población, pero también es cierto que tiene culpa el Gobierno en cuanto a la gestión para impedir la diseminación de esta peligrosa enfermedad”, agregó.
Sistema de detección con pruebas moleculares
Almerí comentó que antes morían menos de 200 personas por día, ahora ya se superó esa cifra. “Hay la necesidad de tomar medidas más drásticas para inmovilizar a la población, pero lo más importante es potenciar el sistema de detección de los positivos mediante pruebas moleculares. Tomar tres mil pruebas moleculares por día para un país de 33 millones es absolutamente ínfimo. La prueba rápida solo detecta a una persona que ya tiene COVID por lo menos hace 10 días y en ese lapso ya contagió a muchas personas”, anotó.
“De acá a diciembre nada va a cambiar, porque no hay tratamiento, tampoco hay vacuna. Ayer, Rusia presentó una vacuna que tiene cuestionamientos y solo puede fabricar de acá a diciembre 1,000 millones de dosis, que ya están vendidas a 20 países. Los otros dos laboratorios Astrazeneca y Moderna sostienen que su producción hasta fin de año sería de 2,000 millones de dosis, que también ya están vendidas. Conclusión: el peruano no tiene que guardar esperanzas que va a llegar la vacuna en poco tiempo”, manifestó.