Fuente : Diario Exitosa
El epicentro fue en el condado de Luding, a unos 200 kilómetros de la capital provincial, Chengdu, con una profundidad de 16 kilómetros.
La provincia de Sichuan, en el suroeste de China, fue sacudida esta mañana por un terremoto de magnitud 6,8 que, hasta este momento, ha dejado el lamentable saldo de 21 personas fallecidas, según lo informado por la televisión pública.
Inicialmente, las autoridades de la ciudad de Garze indicaron que siete personas habían muerto producto del desastre natural, sin embargo, con el pasar de las horas la cifra fue actualizada por la prefectura de Ya’an, quienes indicaron que había 14 ciudadanos más que dejaron de existir.
El potente movimiento telúrico, cuyo epicentro fue en el condado de Luding, a unos 200 kilómetros de la capital provincial, Chengdu, se produjo a una profundidad de 16 kilómetros, según el Centro de Redes Sismológicas del país.
Importante recalcar que los habitantes de Chengdu, de 21 millones de personas, se encuentran confinados por el brote de COVID-19 en la actualidad, por lo que, debido a la no autorización de abandonar sus residencias, se trasladaron a los patios más cercanos para ponerse a salvo, según informa a AFP una vecina de la localidad.
En varios videos reportados por la agencia de noticias oficial Xinhua, se puede apreciar como varias lámparas colgadas se balancean, mientras que los trozos de los edificios se sitúan en el suelo, haciendo complicado el desplazamiento, tanto peatonal como por carreteras.
“Viviendas resultaron gravemente dañadas”, precisó CCTV, citando una conferencia de las autoridades locales, quienes también precisaron que las líneas telefónicas, como es usual en este tipo de incidentes de la naturaleza, han quedado interrumpidas.
Cabe precisar que la última actividad sísmica registrada en Sichuan data del pasado mes de junio, cuando un sismo de 6,1 causó al menos cuatro muertos y múltiples heridos producto del mismo. Mientras que la mayor catástrofe en la provincia se dio en el año 2008, cuando un terremoto de 7,9 causó la devastadora muerte de 87.000 fallecidos o desaparecidos.
