Sostiene que 5 millones de peruanos no tienen acceso al agua y un número mayor no cuenta con servicio de alcantarillado.
Asegura que cada un dólar invertido en agua de calidad repercute con 30 dólares en beneficio de la economía.
RCR, 18 de agosto 2017.- El reto de ofrecer agua segura en las zonas rurales es más complejo por estar dispersas, tienen pocos habitantes y es de difícil acceso, señaló el director de Proyectos del Centro de Competencias del Agua, Bram Willems.
En declaraciones a RCR, Red de Comunicación Regional, el especialista destacó los beneficios de dotar de agua segura, entendida como agua de calidad que cumpla los parámetros establecidos por la OMS.
Indicó que cada un dólar invertido en agua de calidad repercute con 30 dólares en beneficio de la economía.
«Con agua de calidad, hay mayor probabilidad de tener una buena salud y la persona es más productiva», expresó Willems al anotar que al consumir agua de baja calidad, lo primero que surge son las enfermedades gastrointestinales.
En tal sentido, indicó que el agua de calidad constituye la columna vertebral de nuestro desarrollo.
Bram Willems señaló que el Perú todavía tiene brechas importantes, ya que 5 millones de peruanos que no tienen acceso al agua y un número mayor no cuenta con servicio de alcantarillado.
Agregó que los daños ocasionados por el Fenómeno El Niño obligarán a invertir hasta 8 mil millones de soles en la reconstrucción de servicios de agua y desagüe, a lo que se debe sumar la brecha que ya existía y estimada en 51 mil millones de soles.
El director de Proyectos del Centro de Competencias del Agua, destacó que la tarea pendiente es complicada pero destacó que hay una señal clara del gobierno para avanzar.
«La brecha no se va a resolver en los próximos 5 años, tiene que ser un trabajo de largo aliento, con progresos continuos y fortaleciendo las instituciones que ejecutan los proyectos, como son las empresas de agua y saneamiento», señaló.
