Carlos Tapia, analista en temas políticos sostiene que el indultado Alberto Fujimori no ha pedido perdón a los deudos de las víctimas asesinadas en Barrios Altos y La Cantuta, lo que ha indignado a un sector de la población.
RCR, 27 de diciembre 2017.- El indulto no ha sido una sorpresa porque el propio Presidente lo venia planteando hace tiempo, y siguiendo las pautas de las leyes peruanas y apoyado en el debido proceso iba a otorgarse tarde o temprano porque es una gracia presidencial. Lo que para muchos es decepcionante, principalmente los grupos antifujimoristas que lo apoyaron en el Congreso, es que lo haya usado para negociar los votos que necesitaba para evitar la vacancia presidencial, sostuvo Carlos tapia, analista en temas políticos.
“Ya se tenía conocimiento que el presidente le iba a otorgar el indulto, lo había dicho, para que el expresidente no muriera en la cárcel. Además, se conocían las coincidencias programáticas entre Alberto Fujimori y Pedro Pablo Kuczynski”, aseveró a través de RCR
Tapia indicó que, en su opinión, Fujimori no se ha arrepentido de lo que hizo durante su gobierno, y además, no ha pedido perdón a los deudos de las víctimas asesinadas en Barrios Altos y La Cantuta, lo que ha indignado a un sector de la población.
“Siempre quedará como el presidente que abandonó el país y renunció por fax, para tiempo después, postular al Senado japonés, con una total falta de respeto a la nacionalidad peruana, ofendiendo la dignidad del país”, señaló.
Sin embargo, para el analista, las relaciones de PPK con el fujimorismo mejorarán sustancialmente al haber resuelto una de sus más grandes reivindicaciones como es la libertad de su líder histórico. Ello, le podría dar una mayor estabilidad al gobierno afirmando un modelo económico que es compartido por ambos grupos políticos.
Este escenario podría complicarse si proliferan las movilizaciones organizadas por los grupos de izquierda que ya se empiezan a sentir, y si tal como anuncian, se estaría preparando un nuevo pedido de vacancia contra PPK. Ello no le permitiría aliarse con su nuevo socio y perdería gobernabilidad.
