RCR, 27 de octubre.- El sociólogo puneño, Julio Condori Cerdán manifestó que los denominados antimineros sólo buscan indemnizaciones económicas, oponiéndose  a toda actividad minera, bajo el falso argumento que esta es contaminante, incluso desde la fase de exploración.

En ese sentido reiteró que hay gente infiltrada en las diversas protestas sociales en Puno de facciones radicales ligadas a Sendero Luminoso que se acomodan bajo la careta del Movadef

“En Puno hay gente infiltrada, y esa gente tiene nombre propio, Sendero Luminoso (SL), hoy enmascarado con la careta del Movadef,  tal como ocurrió  en la huelga magisterial” sostuvo en entrevista con RCR

El especialista dijo que en la actualidad existe también infiltración de Sendero Luminoso en las Rondas Campesinas que – según dijo – manejan los argumentos de la no inversión absoluta de capitales, sin importarles salir de la pobreza en el país.

Condori Cerdán, manifestó que estos agitadores y radicales se oponen a la inversión minera sin sustento técnico, muchas veces poniendo en riesgo la economía del país comprometiendo jurídicamente al Estado peruano a desembolsar fuertes cantidades de dinero por demandas de indemnización.

Puso como ejemplo en el caso la protesta el “Aymarazo” que le costará al Estado mil 200 millones de dólares, monto que pide la empresa canadiense Bear Creek Mining Corporation como indemnización por la cancelación del proyecto Santa Ana en el distrito de Huacullani, provincia puneña de Chucuito.

La minera expuso que el proyecto fue anulado por presión de las poblaciones aymaras dirigidas por el entonces presidente del Frente de Defensa de los Recursos Naturales, Walter Aduviri, con una postura antiminera radical y con matices políticos.

“Cuando ya se actúa con prejuicios, adelantando opinión sin sustento técnico, evidentemente no se está analizando la real situación, y se perjudica al país”, puntualizó el sociólogo.