RCR, 20 de agosto de 2020.- Iván Hidalgo, experto en gobierno y políticas públicas y exviceministro de Desarrollo Social, sostuvo que el Gobierno debe convocar a todas las iglesias y al sector empresarial para enfrentar de manera conjunta el repunte del COVID-19. Señaló también la necesidad de implementar una estrategia comunicacional adecuada para que la población asuma con mayor responsabilidad la prevención de más contagios.

“No hay nada en política económica, social y sanitaria, si no es un proceso convocante. Todos tienen algo que dar. Si yo carezco de un sistema de identificación de pobres, las iglesias saben dónde están y como llegar. Las Fuerzas Armadas están subutilizadas, están cuidando calles y eso es ridículo, tiene que hacer una labor mucho más efectiva. El sector empresarial por supuesto. Los organismos internacionales tienen experiencia”, indicó.

En declaraciones a Red de Comunicación Regional (RCR), enfatizó que “todos en conjunto tienen que trabajar con un gran articulador y un gran ejecutivo”. “Eso es lo que se necesita ahora. La gente se está desesperando y eso es muy peligroso. Es importante convocar, es importante ver lo que uno hace mejor y nadie va a negar su concurso en una situación de emergencia como la que estamos viviendo. Pero, pretender monopolizar la atención o capitalizar políticamente, eso es negativo”, dijo.

“No se puede matar a tanta cantidad de peruanos, solo por el hecho de querer manipular políticamente las cosas. El monseñor ha dicho que este es el momento que todos tenemos que apoyar, cada uno en su puesto de batalla, cada uno en lo que sabe. Hemos visto en algunos medios las experiencias de otros países de cómo afrontar este problema comunicacionalmente. Esto también es una cuestión de comportamiento, no solamente se trata de aparecer una vez al día”, señaló. 

Remarcó que “todo el mundo lo dice ahora: ¿Cuál es la estrategia comunicacional?”. “Salvo el de aparecer al mediodía y eso no es así. Estamos hablando de cambios de comportamiento, estamos hablando de estrategia comunicacional seria, estamos hablando como hacemos para que la gente tome conciencia de que están haciendo un daño a sus padres, a sus abuelos y a sus hijos. Estamos hablando de falta de manejo y ahí tenemos los resultados. Somos el primer país en contagiados por millón de habitantes, estamos con cifras calamitosas de vergüenza”, apuntó.

Medidas concretas

Hidalgo aseveró que “ante el problema sanitario, el confinamiento consecuente y el impacto económico que nos coloca en una situación muy negativa en Latinoamérica y en el mundo, hay que tener medidas muy concretas”. “Millones de peruanos se han quedado sin empleo, tenemos que implementar en el cortísimo plazo miles de obras”, expresó.

“No basta empaquetar ocho grandes obras que no se pudieron hacer hace tres años y estas por su magnitud y escala van a demorar su ejecución. Ahora hay que empezar obras que demande mucha mano de obra en cada distrito, provincia y región de nuestro país. Son más de 20 mil obras que se pueden realizar inmediatamente, es decir cercos perimétricos en los colegios, baños, postas médicas, carreteras, canales de irrigación, que nos permitan generar más de dos millones de empleo en el corto plazo”, precisó.

Destacó que “el Perú es un país de emprendedores y hay que aprovechar esa dinámica y de paso formalizarlos”. “Existen decenas de miles de microempresas que están esperando que se activen estos programas de abastecimiento en el sector público, en vez de estar importando cosas que se pueden producir en el Perú”, subrayó.

“Lo que falta es imaginación, decisión y evidentemente equipo técnico, porque recursos presupuestales hay. Por ejemplo, si durante tres meses se les hubiese dado mil soles mensuales a las familias en extrema pobreza, que son los que salieron a buscarse el pan, esto hubiese significado 260 millones de dólares, y si se hubiese expandido a los hogares pobres, 1,250 millones de dólares. Fíjense la diferencia presupuestal entre haber invertido bien esos recursos y lo que se está gastando para beneficiar no necesariamente a los más pobres”, remarcó.

Manifestó que “hay que aprovechar esta oportunidad para generar trabajo masivo y de paso cerramos las brechas sociales con proyectos de agua y saneamiento”. “El Perú tiene suficientes recursos para cerrar las brecha, aprovechar para que la población salga del desempleo, que genere sus propios recursos, antes de estar destinando miles de millones de dólares solamente a unos grupos y empresas del mundo formal que es el 30% del Perú, hay un 70% que no lo estamos mirando y son los que tienen que salir día a día a buscarse el pan de cada día en las calles”, dijo.

Señaló que “los bonos, por la falta de focalización e identificación uninominal, han perdido efectividad y lo único que han servido es como focos de contagio”. “Ha fallado el sistema de focalización de hogares y el padrón general de hogares, lo que se tenía hasta hace pocos años era la identificación geográfica de los distritos en pobreza, obviamente el INEI (Instituto Nacional de Estadística e Informática) hacia esas estadísticas, pero el Midis (Ministerio de Inclusión Social) era el encargado de tener un padrón nominal, es decir hogar por hogar de nivel socioeconómico y la posibilidad de detectar las brechas y la atención del mismo. Si eso se hubiese trabajado, no habría mayores inconvenientes”, explicó.

“Lo que pasa es que los programas sociales se han politizado, se han llenado de mucha gente que no necesariamente necesitaba. ¿Qué ha pasado ahora? Que cuando han cruzado información, han entregado bonos a gente que no necesitaba y a los que realmente les urgía no los han considerado. Todos los días vemos que los periodistas identifican con sus cámaras a los hogares que los necesitan y eso es ridículo. El Estado no ha hecho su labor, su labor es saber las necesidades de los hogares en pobreza extrema”, remarcó.

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