Fuente : Agencia Andina
La Comisión Europea (CE) anunció este jueves que ha concluido unas conversaciones preliminares con el laboratorio alemán CureVac para comprar 225 millones de dosis de una potencial futura vacuna contra la covid-19, una vez se haya demostrado su efectividad.
«Se anticipa que la Comisión pueda tener un marco legal en marcha para una compra inicial de 225 millones de dosis en nombre de los Estados miembros, que se entregarían cuando una vacuna haya probado que es segura y efectiva contra la covid-19», explicó la Comisión Europea en un comunicado.
El objetivo de estas conversaciones, que Bruselas está manteniendo en paralelo también con otros fabricantes, es acabar cerrando un acuerdo de compra anticipada que se financiaría con el instrumento de ayuda de emergencia europeo y permitiría al club comunitario garantizarse el derecho a esas dosis de la vacuna cuando esté preparada.
El contrato previsto con CureVac, que se suma a los ya planeados con Sanofi, Johnson&Johnson y al sellado con AstraZeneca, daría la posibilidad a todos los Estados miembros de la Unión Europea (UE) a hacerse con dosis de esa vacuna, así como a donarlas a países en desarrollo.
Con estos avances para un acuerdo, la Comisión ha cerrado o está en proceso de cerrar contratos para adquirir al menos 1.025 millones de dosis de diversas futuras vacunas, una cifra que podría incrementarse vía nuevos acuerdos con las mismas empresas o por contactos con otros laboratorios.
«Cada ronda de conversaciones que concluimos con la industria farmacéutica nos acerca a derrotar a este virus», aseguró en un comunicado la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
El Banco Europeo de Inversiones (BEI) y CureVac firmaron a principios de julio un acuerdo por el que el laboratorio recibirá un préstamo de 75 millones de euros para el desarrollo de vacunas, incluida su candidata frente a la covid-19.
CureVac desarrolla medicamentos innovadores basados en la tecnología del ácido ribonucleico mensajero (ARNm, en inglés), que utiliza esta molécula para transportar la información que debe permitir al cuerpo humano producir sus propias proteínas capaces de luchar contra enfermedades.
La tecnología ARNm puede adaptarse para inducir diversos grados de respuestas inmunitarias contra antígenos proteicos específicos, proporcionando potencialmente vacunas profilácticas potentes para la prevención de enfermedades infecciosas en dosis bajas, así como inmunoterapias para el tratamiento del cáncer.