RCR, 10 de julio de 2020.- Javier Zúñiga, consultor en temas económicos y docente universitario, señaló que las medidas populistas del Congreso y la campaña electoral van a impactar negativamente en la recuperación económica del país hasta después de las elecciones del 2021. Explicó que los inversionistas del exterior van a esperar a que el Perú ofrezca estabilidad económica y política para emprender grandes proyectos.

“En esta campaña hay variables que se paralizan como, por ejemplo, la inversión extranjera directa. Los inversionistas extranjeros prefieren esperar hasta mayo y junio del próximo año para realizar alguna inversión, estoy hablando de alguien que puede invertir hasta $3 mil millones de dólares. Dirá ‘voy a entrar siempre en cuando sea un gobierno que es estable y fomente la posibilidad de desarrollo empresarial’. La afectación de un periodo electoral es evidente en una variable como el PBI”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).

“Para la realización de las inversiones tienen que cumplirse las tres reglas de oro. La primera es un Poder Judicial justo y todavía no existe. Se ha nombrado a la Junta Nacional de Justicia para que vea ese tema y todavía no han iniciado esas labores por más que la empezaron funcionar en enero. Segundo, no se debe cambiar las reglas de juego, pero con el COVID se han cambiado las reglas constantemente. La tercera es la estabilidad política y acá no la tenemos. Cualquier inversionista del exterior al analizar las tres reglas de oro ve que ninguna se cumple”, explicó.

Señaló que el Congreso está demostrando una señal pésima con sus medidas electoreras como el proyecto de ley relacionados con las deudas bancarias. “La señal es pésima porque está demostrando que es un Congreso populista que quiere hacerse notar y entra a un terreno que no le corresponde. Los bancos son los que deben reprogramar todas las deudas de los clientes y depende de la condición de cada cliente. La señal en el exterior es pésima con un Congreso de esa catadura. Están entrando a un terreno que le corresponde a la SBS y a los bancos”, precisó.

Decrecimiento del PBI

Zúñiga dijo que “si es que la economía empieza a reactivarse con todos los sectores funcionando en agosto al 100% podríamos terminar en un nivel de decrecimiento de -12% y seríamos uno de los países que menos crecimiento de la economía tiene en el mundo”. “La razón es la cantidad de 107 días de aislamiento, que ha sido bastante. Otros países han aplicado hasta 90 días de aislamiento y han permitido que sectores prioritarios puedan trabajar con protocolos sanitarios”, dijo.

“Si se hubieran permitido que los sectores minero, pesquero y manufacturero hubieran trabajado, los niveles de decrecimiento no hubieran sido tan importantes como el -40% de abril. Fuera de reactivar toda la economía, se debe tratar de no poner inconvenientes en el camino para que las empresas regresen a trabajar, las que pueden, porque buena parte de las pequeñas y medianas empresas han renunciado en realizar inversión”, aseveró.

Afirmó que “la inversión pública se puede realizar si todos los ministerios gastaran lo que tienen presupuestado”. “En las noticias se ha visto que el Ministerio de Educación no ha gastado nada en COVID y su nivel de gasto es de 20% cuando debería de estar en julio en 50%. Una cosa es gastar eficientemente y la otra es hacer infraestructura. El déficit de infraestructura es más de $ 200 mil millones y se pueden hacer obras de carreteras, puentes y comunicaciones que pueden permitir echar andar el sector de construcción”, anotó.

“Me ha parecido importante el tema de la reconstrucción del norte mediante un trato de gobierno a gobierno del Perú con el Reino Unido para hacer una obra similar a la que se hizo en los Panamericanos y de esa manera se presupondría que el nivel de corrupción sería prácticamente cero. Me parece increíble que durante toda la etapa de aislamiento no se haya podido hacer nada en temas de colegios, que no solo es construirlos sino colocarlos a la altura digital que el momento lo requiere. El no haber gastado nada es una irracionalidad”, subrayó.