Fuente : Diario Pregón
El COVID-19 continua activo en las calles de Apurímac, es por eso que la población viene adaptándose a los protocolos que se implementan en los diferentes rubros de negocios y servicios y aunque muchos aún no comprenden la magnitud de esta enfermedad se ven obligados a cumplir las medidas de bioseguridad por obligación.
Los establecimientos como: mercados, farmacias, abarrotes entre otros no permiten la aglomeración de personas en el interior de sus locales, y antes del ingreso los usuarios deben lavarse las manos, desinfectar los zapatos y en muchos casos son controlados en la temperatura corporal para mayor seguridad.
El tiempo que normalmente utilizábamos para realizar compras o acudir a los servicios se incrementó por estos protocolos y además se deben realizar colas con el distanciamiento correspondiente para evitar los contagios.
A pesar de estas medidas, en las calles aún no se pone en práctica el distanciamiento social, situación que pone en riesgo a la población que aún no entiende que es la única manera de evitar contagios, y que este virus puede ser fatal para cualquier persona según su condición de salud.
Por ahora los protocolos exigidos en muchos locales se cumplen cabalmente, aunque falta trabajar más en otros locales como el caso de los bancos donde existe una aglomeración de ciudadanos y no hay quien ponga orden y nuevas medidas que pueda contrarrestar este problema. A pesar que los infectados del coronavirus sube cada día en Abancay.
Apurímac superó el millar de casos positivos de COVID-19, y según las cifras oficiales esta última semana (del 28 de junio al 05 de julio) se detectaron 179 nuevos contagios bajo 2 mil 638 pruebas rápidas realizadas y lamentablemente durante estos 7 últimos días se días se reportó la muerte de 2 personas.
