Presidente del Instituto Peruano de Administración Municipal (IPAM), Marco Tulio Gutiérrez, desmintió también la falsa reivindicación de la investigada exalcaldesa de Lima, Susana Villarán, sobre supuesto “izquierdismo” y, peor, aún cercanía a la gestión municipal del recordado exburgomaestre capitalino de Izquierda Unida (IU), Alfonso Barrantes Lingán.
RCR, 13 de mayo 2019 .- Los más de US$ 10 000 000 (diez millones de dólares) entregados por las dos más importantes empresas corruptas brasileñas, Odebrecht y OAS, a la exalcaldesa de Lima, Susana Villarán, se emplearon en un gran porcentaje para el pago de “vulgares sobornos”, por las licitaciones de los contratos de infraestructura otorgados a dichas compañías, denunció el presidente del Instituto Peruano de Administración Municipal (IPAM), Marco Tulio Gutiérrez.
“Este dinero hay que dividirlo en dos partes. 1- Primero, lo que seguramente se utilizó. Los US$ 2 000 000 (dos millones de dólares) que le dieron a (Valdemir) Garreta, para pagarle a (Luis) Favre, los paneles, para pagar a los artistas, deportistas y todo aquel que recibió billete para prestar su imagen en apoyo a la campaña del No. 2- Y todo lo demás fue, simple y llanamente, un vulgar soborno. Así de simple. Por los contratos”, subrayó.
En ese contexto, advirtió que sucedido en el caso de Villarán “es una cosa bastante seria”, ya no se trata ya únicamente de un problema de los aportes de campaña.
“Ahora ya estamos ante un caso que ya no es aporte de campaña. Porque, definitivamente, nunca se gastaron (en su integridad los) US$ 10 000 000 (diez millones de dólares) para la campaña de la señora Villarán. Ni para la revocatoria, para salvarse de ella; ni cuando pretendió reelegirse”, puntualizó.
En diálogo con el programa “Hora de Cambio” de Red de Comunicación Regional (RCR), desmintió también la falsa reivindicación de la investigada exalcaldesa de Lima, Susana Villarán, sobre supuesto “izquierdismo” y, peor, aún cercanía a la gestión municipal del recordado exburgomaestre capitalino de Izquierda Unida (IU), Alfonso Barrantes Lingán.
“Yo fui bastante en señalar que esa señora no era de izquierda. Por una cuestión. Ella trataba de reivindicar que había trabajado con Alfonso Barrantes, lo cual no era cierto. Eso nunca lo habíamos visto nosotros, quienes habíamos trabajado en la formación de Izquierda Unida, en 1980. En las dos gestiones de Alfonso Barrantes, no habíamos tenido el gusto de conocerla”, subrayó.
El exregidor metropolitano por IU indicó igualmente que sectores de la izquierda peruana le habían manifestado que la gente se había acercado y trabajado con ella en su gestión edilicia era proveniente de los Organismos No Gubernamentales (ONGs) de los que se conoce como la “izquierda caviar”.
“Pero nada de la izquierda militante, programática, doctrinaria, organizada y partidarizada. Recordemos que la Izquierda Unida fue un conglomerado de organizaciones políticas y no solamente personalidades”, anotó.
En ese sentido, precisó que, a diferencia de Susana Villarán, el alcalde de Lima, Alfonso Barrantes, fue ejemplo de una tremenda honradez, y de una gestión transparente e íntegra, recordada por adversarios y partidarios.
“En el caso de la Izquierda Unida, nos fuimos totalmente impecables. Con la certificación de la Contraloría d que se había actuado honestamente en el manejo de los recursos de la municipalldad de Lima”, enfatizó.
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