El personal de la Oficina Desconcentrada de Control Interno (ODCI) encuentra en el escritorio y en el estante, y detrás de este, cuatro fusiles, ocho entre pistolas, revólver y hechizas, así como municiones. De este armamento la mayoría no estaba debidamente lacrada, algunos tenían cadena de custodia y otros no.

En Tumbes, el personal de la Oficina Desconcentrada de Control Interno (ODCI) halló doce armas de fuego sin la debida cadena de custodia en el despacho que usaba el fiscal Armando Soluco Zapata, quien días antes fuera apartado en su ejercicio de función fiscal, por la presunta comisión de infracción administrativa y disciplinaria.

El viernes 31 de marzo, en un operativo de rutina el representante de la ODCI del Distrito Judicial de Tumbes, Manuel Arnaldo Malpartida Solano, llegó hasta la Fiscalía Provincial de Zarumilla, donde es comunicado por el fiscal coordinador Melvin Ludeña Ocaña, que se había hallado armamento en la oficina que utilizaba el doctor Armando Soluco, la misma que se encuentra en el tercer piso.

En el escritorio y en el estante, y detrás de este, se localizaron un total de doce armas, cuatro fusiles, ocho entre pistolas, revólver y hechizas, así como municiones.

De este armamento la mayoría no estaba debidamente lacrada, algunos tenían cadena de custodia y otros no.

Soluco, quien se desempeñaba como fiscal adjunto de la Segunda Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Zarumilla, debería haber entregado en un plazo máximo de tres días calendarios de cada intervención o recepción del informe policial, al almacén de dicha institución o en la comisaría del sector, lo cual no lo habría hecho.

Estas armas han debido de ser homologadas judicialmente con los diferentes casos de crímenes o actos delictivos, que se han reportado en la provincia Zarumilla o en otro punto del país.

El integrante de la Oficina Desconcentrada de Control Interno (ODCI) junto con el representante de dicha Fiscalía jurisdiccional levantaron un acta correspondiente, para que se inicie la investigación contra el hoy separado del ejercicio fiscal, Armando Soluco , en vista que no había razón para que este armamento se encuentre en su oficina de la Fiscalía.

Además de existir una normatividad para la custodia y administración de bienes incautados.

El ODCI revisará carpeta por carpeta fiscal, donde el abogado Armando Soluco haya investigado, haber si existe indicios si los procesos llevados han caído en saco roto o han tenido un buen fin en el sentido de justicia.

REGLAMENTO. Según el Reglamento de Cadena de Custodia de Elementos Materiales Evidencias y Administración de Bienes Incautados, aprobado por resolución N° 729-2006 -MP-FN-del 15 de junio del 2006.

En el artículo 11 en lo que respecta al Formato de Cadena de Custodia, señala que los elementos materiales, evidencias y bienes incautados se registrarán en el formato de la cadena de custodia mediante una descripción minuciosa y detallada de los caracteres, medidas, peso, tamaño, color especie, estado, entre otros datos del medio en el que hallaron los elementos materiales y evidencias, de las técnicas utilizadas en el recojo y pericias que se dispongan, en el cual no se admiten enmendaduras.

En el artículo 14 en lo que refiere a Registro y Custodia, este indica que es el procedimiento que se desarrolla con el objeto de garantizar el ingreso, registro, almacenaje, administración y salida de los elementos materiales y evidencias. En un plazo máximo de tres días calendarios de la intervención o recepción del informe policial, el fiscal dispondrá el destino al almacén, conforme a los siguientes lineamientos:

El personal asignado por el fiscal o la autoridad policial, en delegación, recibe el mandato y el formato de cadena de custodia. Quien entrega y quien los recibe, verifica el estado de los mismos o sus embalajes, los cuales deben estar íntegros, sin presentar alteraciones. Los rótulos o etiquetas no deben mostrar enmendaduras.

Se registra en el formato de cadena de custodia el traslado y traspaso, fecha, hora, dejándose constancia de las observaciones pertinentes.

En el artículo 15 que describe sobre el traslado para la diligencia, manifiesta que cuando sea necesario llevarse a cabo una diligencia fiscal o judicial en la que se requiere tener a la vista los elementos materiales y evidencias o una muestra de ella, el fiscal dispondrá el traslado, indicando el personal responsable.

El responsable del almacén de bienes incautados cumplirá con el mandato en la forma y plazo que disponga la autoridad requiriente.

Según lo expuesto en estos artículos, al parecer, el hoy apartado de la función fiscal, Armando Soluco, no siguió el reglamento y directivas internas del Ministerio Público.

Otro proceso le iniciará la Oficina Desconcentrada de Control Interno (ODCI).

APARTADO. Cabe mencionar que la Fiscalía Suprema de Control Interno a través de la resolución Nº 502-2017-MP-FN-FSCI- de Lima 23 de marzo, dispuso la medida de apartamiento en el ejercicio de la función fiscal contra Armando Soluco Zapata, fiscal adjunto de la Segunda Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Zarumilla, por estar inmerso en el encubrimiento de los delitos de la organización criminal “Los Chivitos de Campo Amor”.

De acuerdo a las diligencias que realizó la Oficina Desconcentrada de Control Interno de Tumbes, se conoció que el fiscal en mención no habría formalizado las investigaciones en relación a los actos delictivos que cometió la organización criminal en la provincia fronteriza.

Según dicha resolución, la medida cautelar de apartamiento limita que Armando Soluco no preste servicios, ni reciba remuneraciones.

En parte del documento que según la manifestación de Jhon Fernando Rivera Pisfil de folios 474 a 484 en la que señala que el fiscal adjunto provincial objeto del apartamiento ha solicitado al investigado 3 mil soles, los mismos que le fueron entregados, para archivar un caso que era de su conocimiento.

Según detalla el informe, David Ascencio Rodríguez (a) “Chivo Daniel”, integrante de “Los Chivitos” entregaba dinero a tres fiscales de Zarumilla.

Asimismo, el cabecilla Jhon Rivera Pisfil alias “Jhon Chivo”, se encargaba de amenazar a los fiscales.

Fuente: Correo – Edición Tumbes