RCR, 21 de marzo de 2025.- Rubén Carrasco, director ejecutivo de Cultivida, señaló que el sector se mantiene en alerta ante la posible aplicación de aranceles a los alimentos por parte del gobierno de Estados Unidos, en ese sentido, recalcó que el país está preparado, ya que importa los alimentos a 120 países, con crecimiento en mercados asiáticos. Agregó que es necesario impulsar un programa de infraestructura hídrica, ya que las actuales represas están colmatadas.
“El anuncio del nuevo gobierno de Estados Unidos frente a las medidas arancelarias con otros países vecinos, nos ponen en alerta porque teniendo tratados con Canadá, al igual que con nosotros, se están imponiendo ciertos aranceles que afectan a los productos importados a y nos pone en una situación expectante para analizar si es que vamos a poder salir adelante”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
Precisó que la clave del éxito en el sector agroexportador ha sido la diversificación de productos en diversos mercados del mundo. “Nosotros exportamos a 120 países, sin embargo, sabemos que un mercado importante es Estados Unidos por lo que debemos mantener esas relaciones y agotar el diálogo hasta el final”, expresó.
Carrasco sostuvo que el 34% de las exportaciones son de Estados Unidos, principalmente de frutas como los arándanos, mango, uva, inclusive el café. Asimismo, consideró que el Perú está preparado para seguir posicionándose en el mercado internacional.
“El último año hemos tenido un crecimiento del 21% en productos no tradicionales a los, Emiratos Árabes, es más hay inversionistas que están comprando tierras en el Perú y están invirtiendo, por supuesto esto también redunda en los mercados de inversión, es decir, al final son nuevos mercados que se están abriendo para el país”, anotó.
Enfatizó que aún faltan algunos trabajos de infraestructura para poder ejecutar megaproyectos, además de tomar medidas preventivas frente al cambio climático que afecta a los agricultores, que son resilientes cuando se presentan las inundaciones o épocas de estiaje y tratan de sacar adelante sus cultivos.
“Adolecemos de los trabajos preventivos, de los planes de trabajo en dimensión de descolmatación, programas de mantenimiento o planes de mantenimiento de las represas hídricas del norte, que ahora nos pasan la factura cuando se presentan estas inundaciones, como la represa de Poechos que ya no tiene la misma capacidad útil que tenía hace años”, mencionó.
Remarcó que se requiere de un trabajo conjunto entre el sector público y privado para impulsar represas alternas y elevar la capacidad. “Tratamos de pedirle al Gobierno trabajar con un plan estratégico sostenible, porque el tema tiene que ver mucho con las comunidades, es un factor importante para evitar convulsiones o los conflictos sociales”, subrayó.
