RCR, 13 de Diciembre 2024.- La presidenta Dina Boluarte confirmó que se sometió a una intervención quirúrgica en junio del año pasado, pero sostuvo que «no fue una intervención estética». Según su versión, era una operación necesaria para su salud por un supuesto problema de funcionalidad respiratoria.

En un mensaje a la nación, Boluarte insistió en negar que la intervención la haya incapacitado para ejercer sus funciones como presidenta. Argumentó que, de haber sido así, no hubiera podido firmar las 91 normas que ahora algunos sectores acusan de tener firmas falsificadas. La presidenta calificó estas acusaciones como un nuevo intento de desestabilización.

Boluarte dijo estar dispuesta a renunciar a su derecho de confidencialidad médica y entregar su historial clínico al Ministerio Público cuando sea citada nuevamente. La mandataria espera que esta acción aclare cualquier duda sobre su capacidad para gobernar.

En otro momento de su mensaje, aseguró que siempre ha sido respetuosa de las autoridades judiciales, pero que en este caso se están utilizando temas de su vida personal para un supuesto plan de desestabilizar a su gobierno.

Boluarte pidió a la fiscal de la Nación, Delia Espinoza, que la cite a declarar en esta investigación que abrió en septiembre pasado por el caso del vehículo presidencial, conocido como el ‘cofre’. Sostuvo que nunca estuvo en el condominio Mikonos, al sur de Lima, sino en otro lugar por una invitación y acompañada de una amiga.

Agregó que se trató de una visita a una familia y que no hay nada irregular, anti ético o ilegal en su actuación. La presidenta dijo que no ocultó a ningún delincuente ni utilizó bienes del Estado para encubrir a personas buscadas por la justicia, en referencia al prófugo dirigente de Perú Libre, Vladimir Cerrón.