RCR, 06 de diciembre de 2024.- Daniel Hermoza, director de MYPES Unidas del Perú, señaló que la inflación, la falta de liquidez y el incremento de los créditos informales afectan gravemente al sector de las micro y pequeñas empresas en la actual campaña navideña.
“El año pasado fue bien complicado por el tema de la inflación, entonces hay una un gran porcentaje de los empresarios que no está muy entusiasmado o que por último piensa de que esta campaña de navideña no va a ser lo que ellos esperaban”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
Destacó que esta temporada es crucial para las MYPES, ya que representa el 40% de sus ingresos anuales. Sin embargo, reveló que los beneficios de la recuperación macroeconómica del país aún no se reflejan en el sector.
“Estamos en un proceso muy lento de comenzar a activar sectores económicos del país, pero en esta campaña navideña el espíritu del empresario es tratar de llegar al bolsillo del consumidor para que pueda tener una venta porque lo que estamos privilegiando es la liquidez porque el 40% de los ingresos del año están en la campaña navideña donde la gratificación ayuda muchísimo a elevar el consumo”, declaró.
Por otro lado, advirtió que el auge de los préstamos informales conocidos como “gota a gota”, ya suman más de 1,500 millones de dólares según la Federación Peruana de Cajas Municipales de Ahorro y Crédito (FEPCMAC). “Estamos viendo un fenómeno bastante grave, las microfinanzas están compitiendo con los préstamos informales”, afirmó.
En ese sentido, explicó que la falta de respuesta del sistema financiero se debe al marco legal y a las normativas del país, que los limita a otorgar préstamos a microempresarios sin garantías.
“Los bancos se cuidan muchísimo de cumplir las normas que dicta la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS) y obviamente el marco legal que tiene el sistema financiero. Entonces eso les hace muy complicado entregarle crédito a estos microempresarios quienes quedan a disposición de los créditos gota a gota”, expresó.
Hermoza resaltó el impacto de la criminalidad que ha afectado a Gamarra, considerado símbolo de las MYPES peruanas y que recientemente ha sido declarado en estado de emergencia. “Gamarra es un símbolo de las MYPES, pero el mismo efecto que está sufriendo y en general todos los empresarios de todos los sectores también lo vive en las regiones, como Arequipa Piura y Trujillo, que es donde nace toda esta dinámica extorsionadora”, afirmó.
Finalmente, sostuvo que el gobierno ha delegado responsabilidades preventivas al sector privado, cuando debería implementar políticas coherentes que fortalezcan la seguridad, promuevan el acceso al crédito formal y fomenten el empleo juvenil.
“Tenemos que comenzar a prevenir y eso es parte del trabajo del Estado y nosotros estamos planteando cosas permanentemente por escrito al Ministerio de Trabajo para crear un Plan de Empleo Juvenil que, hasta ahora, ni siquiera han tenido la gentileza de responder”, concluyó.
