Exministro de Relaciones Exteriores, Oscar Maúrtua, precisó también que requisito del pasaporte venezolano como único documento de identidad para el ingreso de los nacionales de ese país, no es un impedimento, sino “un legítimo derecho” del Perú “para que las cosas marchen bien”.   

RCR, 25 de agosto. Las organizaciones internacionales humanitarias y financieras tienen que dotar de recursos al Perú para que pueda afrontar las consecuencias económicas del flujo descontrolado de migrantes venezolanos a nuestro país, demandó el exministro de Relaciones Exteriores, Oscar Maúrtua.

“Este es un tema primordial. Aquí, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados, la Organización Mundial de la Salud (OMS), UNICEF, la propia Organización Internacional para las Migraciones (OIM), que viene apoyando con recursos que permitan sacar adelante este problema humanitario. Creo que tenemos que contar con todo el apoyo de la comunidad internacional para poder habilitarnos de recursos”, subrayó.

En ese sentido, expresó que las estimaciones internacionales calculan en aproximadamente medio millón los refugiados venezolanos que nuestro país recibirá para fin de año, lo que -anotó- obliga al Perú a adoptar previsiones en diversos aspectos, tales como, por ejemplo, la seguridad.

“¿Se imagina usted el impacto sobre la salud, el orden interno, la seguridad o el empleo? Es muy delicado. Y es por eso que el gobierno está adoptando previsiones justicieras para poder actuar con prudencia”, anotó.

En diálogo con Red de Comunicación Regional (RCR), Maúrtua precisó también que el requisito de la presentación del pasaporte venezolano como único documento de identidad para el ingreso de los nacionales de ese país, no es un impedimento, sino “un legítimo derecho” del Perú “para que las cosas marchen bien”.

“Es legítimo derecho tomar también determinadas previsiones porque hay una responsabilidad de orden interno.  Sabemos que el 80 por ciento son personas portadoras de pasaporte, aproximadamente. Sabemos que el 60 por ciento de venezolanos que ingresan al país son profesionales con títulos académicos. Pero resta un 20 por ciento que no tiene.”, apuntó.

En todo caso, el diplomático no descartó la posibilidad de que, a futuro, el Perú pueda hacer “una distinción puntual” en los casos más sensibles de los pobladores vulnerables. “(Hay que) proteger a las madres, los menores de edad y discapacitados, a los que se podría brindar un tratamiento especial”, remarcó.

“El Perú ratifica siempre una política de socorro que se ampara en el derecho humanitario que tiene un sustento válido en lo que son los derechos humanos. Y por ende estamos acogiendo un número significativo de hermanos venezolanos”, recalcó.

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