RCR, 13 de abril de 2023.- El ingeniero Jorge Montenegro Chavesta, exministro de Agricultura, dijo que en el Perú no falta el agua, lo que falta es infraestructura hidráulica, para almacenar y distribuir el agua para uso poblacional, agrícola e industrial. Lamentó que, por ejemplo, en Cajamarca exista un proyecto interesante como la presa de Chonta, que sigue sin despegar y abastecer de agua al distrito de Baños del Inca.
“No es que falta agua, lo que falta es infraestructura. Si logramos tener este conjunto de presas y ponerlas en un plan de intervención con una política de Estado, con una mirada de que venga quien venga tiene que hacerlo, porque si en 10 años que vienen no tenemos este abastecimiento y este trasvase de agua vamos a tener conflictos entre el uso agrario y el uso poblacional, incluyendo otros usos”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
Señaló que la idea es hacer un listado de proyectos y colocarlos en un plan hidráulico que nos permita saber exactamente cuál es la necesidad y la obra de almacenamiento que cada región puede tener. “Eso no es nuevo, eso se viene construyendo, pero falta la aceptación social y el recurso económico para darle la viabilidad. Se tiene tener un horizonte de cinco años a 10 años para contar este tipo de infraestructura, en el sur, en el centro”, indicó.
Enfatizó que no solamente se debe hablar del almacenamiento como aprovechamiento, sino tomar en cuenta los planes integrales con un marco conceptual. “Ese marco conceptual tenía como ejercicio tres acciones básicas: lo que son defensas ribereñas en la parte baja, una presa de laminación, que tiene como función contener e ir liberando según la capacidad del río”, precisó.
“En las partes altas tenemos que ir construyendo porque hay suelo que se está degradando y nos pasan la factura en la parte media y baja con el sedimento permanente que existe. Y lo que es la forestación y reforestación. Ese era y es el marco conceptual de las soluciones integrales. Eso para evitar derrumbes y afectaciones tanto a las personas como a la infraestructura expuesta”, agregó.
Mencionó que hay proyectos que están próximos a iniciarse. “En Tumbes tenemos dos presas interesantes y que hubo resistencia, porque allá querían la presa que está justamente inundando la zona de Ecuador. Más abajo tenemos Vilcazán, que no ha podido ser por cuestiones sociales. Tenemos en el mismo río Piura la presa La Maravilla, incluyendo unas presas en cabecera que son presas de trasvase”, apuntó.
“El río Piura tiene más de 4000 en épocas extraordinarias y si le restamos 200 nos queda 3800, por lo que sigue siendo una amenaza para Piura. Si no contamos con una presa de laminación, la capacidad del río siempre va a estar prácticamente expuesta al desbordamiento y eso nos complica más con la parte baja, donde tenemos un estuario y criadores de conchas de abanico, la agricultura en general”, observó.
También mencionó los proyectos de Motupe y Montería en Lambayeque que no se han podido hacer. “Tenemos La Calzada y Alicantro. Tenemos la presa Las Delicias que está en Zaña, que tendría un almacenamiento casi de 80 millones de metros cúbicos, que podría regular y mejorar las condiciones hídricas en esa zona. Más abajo tenemos Jequetepeque, segunda etapa, pero todavía no se ha tomado muy en cuenta. Más abajo tenemos en el río Chicama algunas zonas que pueden ser aprovechables”, declaró.
Remarcó, por ejemplo, que en Cajamarca hay un proyecto interesante que se llama Chonta, pero que sigue sin ejecutarse. “Lamentablemente esta presa que abastecía a la zona de Baños del Ica, ha sido prácticamente impactada, porque por ahí se ha comenzado a construir una carretera. Se ha visto hacer dos presas aguas arriba para regular el caudal de Cajamarca y abastecer de agua poblacional a Baños del Inca, que es una zona que tiene déficit de agua”, subrayó.