Ricardo Remicio, jefe de la micro red de salud Tambogrande: Muchos niños son recuperados de las garras de la anemia y desnutrición con micronutrientes y suplementos, pero cuando vuelven a casa, la falta de agua y malas condiciones sanitarias, los hacen recaer. El agua y saneamiento es vida.   

RCR, 10 de mayo 2018.- El distrito de Tambogrande tiene la urgente necesidad de disponer de redes de agua potable de calidad, y sistemas de eliminación de excretas y de residuos sólidos, por la importancia estratégica que tienen en el combate contra la anemia y desnutrición crónica que padecen un gran porcentaje de niños de la zona, sostuvo Ricardo Remicio Montero, jefe de la micro red de salud de Tambogrande

En diálogo con red de Comunicación Regional (RCR), el galeno reveló que el año pasado, a nivel de todo el distrito, se reportó un 45% en promedio de niños con anemia. Sin embargo, en la margen izquierda del río, el problema fue mucho más grave, hallándose más del 60% de niños afectados con este mal, principalmente en centros poblados como La Greda, Locuto, Angostura, entre otros.

Precisó que estos son lugares donde la disponibilidad de agua es un problema latente, y aunque la municipalidad está haciendo su mejor esfuerzo trabajando para solucionar esto, aún no se logra la meta de conectar a toda la población con agua de calidad.

ESFUERZOS ARTICULADOS

En el caso de la micro red de salud de Tambogrande, Remicio informó que continúan coordinando con diversas organizaciones como la municipalidad distrital, el programa Juntos, la UGEL, y las ONG Plan Internacional y Prisma, en forma conjunta para articular un trabajo uniforme para derrotar a estos flagelos que destruyen a nuestra niñez.

“Se han obtenido buenos resultados a través del tamizaje de niños anémicos. A través del padrón nominal se ubicaron casi 800 niños en todo el distrito, y trabajando con suplementos de fierro y micronutrientes, se obtuvo una recuperación de más de 90% de infantes”, reveló.

Señaló que la anemia y desnutrición crónica son problemas multifactoriales en los cuales, los factores sociales son excluyentes: Cuando las familias no tienen acceso a agua de calidad y a  la eliminación de excretas y residuos sólidos, se generan enfermedades parasitarias, bacterianas, diarreicas, etc. que los llevan a la anemia y desnutrición, mermando el desarrollo normal de los niños.

“Es definitivo, cuando las condiciones sanitarias de los hogares no son buenas, aunque los niños se recuperen de la anemia, pueden volver a recaer. El agua es el elemento crucial que los puede alejar de una vida sin futuro”, concluyó.