El primer ministro australiano, Malcolm Turnbull, dijo que analizó el tratado el lunes por la noche con su par japonés, Shinzo Abe, y que sostuvo conversaciones con los líderes de Nueva Zelanda y Singapur.
(Bloomberg) Australia encabeza una ofensiva para rescatar un acuerdo comercial transpacífico después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, retirara formalmente a su país como signatario del acuerdo de 12 naciones.
El primer ministro australiano, Malcolm Turnbull, dijo que analizó el tratado el lunes por la noche con su par japonés, Shinzo Abe, y que sostuvo conversaciones con los líderes de Nueva Zelanda y Singapur.
“Todos estamos trabajando para ver cómo podemos garantizar que se mantenga este impulso hacia los mercados abiertos y el libre comercio”, señaló Turnbull en Sídney. La salida de Estados Unidos del TPP “es, sin duda, una gran pérdida, pero no vamos a abandonar nuestro compromiso con los puestos de trabajo australianos”.
Al tiempo que Trump hacía campaña prometiendo alejarse del TPP y acusando a los tratados comerciales de destruir los empleos del sector manufacturero de Estados Unidos, naciones asiáticas como Japón realizaron un último esfuerzo desesperado para convencerlo de las bondades del pacto.
Más allá del comercio, el acuerdo es considerado un freno estratégico al creciente poderío militar y económico de China en la región.
Lograr un acuerdo sin Estados Unidos sería difícil. Sin la atracción del enorme mercado estadounidense, sería complicado conseguir que los países miembros acuerden el mismo acceso que el estipulado en el marco del TPP, afirmó Jayant Menon, economista jefe de comercio y cooperación regional del Banco Asiático de Desarrollo.
“Esto es salvar las apariencias, dijo Menon de los esfuerzos australianos. “Es muy humillante para todos estos países que uno de los más fervientes propulsores del acuerdo luego sea el que lo destruya”.
Aún no se sabe si algo saldrá de esto. Japón actualmente no está evaluando un TPP sin Estados Unidos, dijo Koichi Hagiuda, secretario adjunto del gabinete de Japón, a la prensa en Tokio. Japón y Estados Unidos representan más del 75% del Producto Bruto Interno (PBI) entre los países miembros.
“Queremos seguir persuadiendo a Estados Unidos de los beneficios económicos y estratégicos”, dijo a los periodistas el ministro de Comercio Hiroshige Seko. “Es extremadamente importante que la principal economía, Estados Unidos, sea uno de los países que integran el acuerdo TPP. Continuaremos tenazmente recordándoselo a Estados Unidos”.
Singapur, uno de los principales perdedores potenciales de una caída del comercio global, ha señalado que alentará la implementación del TPP incluso sin la presencia de Estados Unidos.
“Preferíamos que Estados Unidos permaneciese en el TPP”, dijo el ministro de Comercio de Nueva Zelanda, Todd McClay, en un comunicado por correo electrónico. “Sin embargo, el tratado aún tiene valor como acuerdo de libre comercio para los restantes países miembros”.
Ciobo, ministro de comercio de Australia, dijo que mantuvo conversaciones con Canadá, México, Japón, Nueva Zelanda, Singapur y Malasia. Aunque evalúan el futuro del TPP, algunos países asiáticos como Malasia y Japón ahora ponen la atención en la Asociación Económica Regional Integral (RCEP), un acuerdo alternativo de 16 naciones que incluye a China e India.
Fuente: Diario Gestión