Con goles de Jefferson Farfán y Christian Ramos, la selección peruana dirigida por Ricardo Gareca selló su triunfo e hizo realidad el sueño de millones de hinchas peruanos de ver al Perú en un mundial tras 36 años de ausencia.

Los muchachos se unieron en un abrazo eterno y fraterno al finalizar partido. El Nacional no dejó de vibrar y alentar a la selección durante los 90 minutos. El triunfo peruano fue contundente que no hubo necesidad de tiempos complementarios ni para penales.

En las calles y plazas estallaron de júbilo cuando el arbitro francés, Clément Turpin pitó y puso término al encuentro.

Grandes caravanas de hinchas se volcaron a las calles y el país vivió una fiesta.